Detienen a un policía por sospecha de feminicidio
Por tercera vez en menos de un año, un efectivo de la fuerza pública se ve implicado en un presunto feminicidio. Se trata del cabo de la Policía, Javier Vidal Valdez Mayta, del Primer Batallón de Seguridad Privada, quien fue detenido ayer como sospechoso de la muerte de su enamorada, Martha Quispe Mamani (48).
El pasado 5 de marzo, la subteniente Pamela Tito Roque fue asesinada por su expareja, Sergio Sánchez, en el Batallón Logístico, con un fusil que salió irregularmente de la Policía Militar de Cotapachi. El autor se suicidó.
El 11 de agosto, la universitaria Jakeline Hermosa Añez (21) fue asesinada con un disparo por su exenamorado, Fidel Choque, un subteniente de la Fuerza Aérea que no dejó su arma de reglamento en la armería cuando fue cambiado de destino y usó la misma para acabar con la vida de la joven, el padre y hermano de ésta.
La Felcv maneja con hermetismo la investigación de Martha Quispe y anunció que no dará ningún informe hasta que concluya la prueba de absorción atómica (guantelete), que puede durar 10 días. El Comando Departamental de la Policía dijo que tampoco se pronunciará.
Aunque el feminicidio es la principal hipótesis, no se descartan otras posibilidades como un ajuste de cuentas, porque la mujer tenía antecedentes de narcotráfico, dijeron otras fuentes.
Por los elementos encontrados en la escena del crimen, se conoce que la víctima fue hallada muerta en su casa, ubicada en Villa Armonía, en el kilómetro 2 de la avenida Petrolera, en la zona sur.
Las vecinas declararon que al promediar las 6:00 vieron la puerta del domicilio abierta y a la mujer tendida en el suelo.
Según informó el director de la Felcv, Iván Luque, se está haciendo la prueba de absorción atómica para determinar si el detenido disparó. De confirmarse el feminicidio, sumarían a 14 las muertes de mujeres por razones de género. Mientras, en 2016 se registraron 24 feminicidios.
Según informó el subcomandante de la Policía, Rolando Montaño, a la fecha se registraron 4.514 denuncias por violencia contra la mujer. En tanto, en 2016 se tuvieron 4.689 casos.
FALTA EVALUACIÓN A POLICÍAS
La directora de la Oficina Jurídica para la Mujer, Julieta Montaño, lamentó el último hecho de feminicidio. Manifestó que la ciudad atraviesa una crisis en la que se victimiza a las mujeres y expresó su preocupación por la implicación de agentes.
“Preocupa que sean policías los que estén implicados en estos hechos gravísimos, porque no existe una instancia seria, independiente que sea capaz de hacer un seguimiento al trabajo de los policías y un tribunal disciplinario que haga la evaluación”, dijo.
Asimismo, señaló “la camaradería entre colegas”, como factor que ha permitido que hechos de violencia queden impunes.
Dijo que la Policía no cuenta con una instancia externa que evalúe de manera imparcial el perfil psicológico del personal. “Se deben establecer igual mecanismos de disciplina interna”, dijo. La activista del colectivo Mujeres de Fuego, Ángela Nogales, manifestó que la víctima recibió varias amenazas del uniformado y que es pariente de una integrante que perdió a su hija.
