Envían a la cárcel a presuntos secuestradores
Tras la audiencia de medidas cautelares, la Fiscalía determinó hoy enviar a la cárcel a los hermanos Abigail y Elmer Chuquimia, presuntos secuestradores de la niña Camila, que fue encontrada ayer en la zona Senkata de El Alto.
Abigail cumplirá detención preventiva en el Centro de Orientación Femenina (COF) de Obrajes y su hermano en la cárcel de San Pedro.
"Hemos dirigido la investigación desde el inicio con la entrevista a los padres, el cruce de llamadas y otros indicios, que han permitido resguardar la vida de la niña. La Fiscalía es implacable en la lucha contra ese flagelo", manifestó el fiscal departamental de La Paz, Edwin Blanco Soria.
El Ministerio Público sustentó la imputación por los delitos de trata y tráfico y secuestro, con los indicios colectados, tales como: la triangulación del flujo de llamadas y el retrato hablado de Abigail, quien se hizo pasar por la niñera de la menor para recogerla de su colegio particular, minutos antes de que su madre llegue, según indica un comunicado de prensa de la institución.
La menor desapareció alrededor de las 13:00 del jueves, cuando estaba en su colegio y una joven, asegurando ser su niñera, se la llevó del colegio. El rapto ocurrió cinco minutos antes que los padres de la menor lleguen al colegio, informó el ministro Carlos Romero.
Versión de la defensa
Pablo Pareja, abogado de Abigail Chuquimia, manifestó que su clienta fue obligada y amenazada a cometer el delito.
"Fue obligada, amenazada, porque lo que refiere mi cliente es que Andrés en El Alto la amenazó indicando que tenía datos de sus familiares y si no le hacía caso iban a correr peligro de muerte sus familiares", mencionó según medios locales.
Habla el padre de los imputados
René Chuquimia, padre de los imputados, llegó a La Paz desde Los Yungas para ver a sus hijos. “Mi hijo es inocente; mi hija, ya no puedo decir nada porque es mayor de edad. No creo esto que ha pasado, hay otras personas que me lo instigado, Pido disculpas a los papás, porque no pueden hacer esto, no podemos hacer daño a ellos, tampoco a nosotros, somos humanos y mis tienen bastante futuro”, manifestó citado por Erbol.
Detalles de la investigación
De acuerdo con las versiones de los familiares de la víctima, los secuestradores se comunicaron telefónicamente para pedir una recompensa económica de 50.000 dólares a cambio de entregar a la niña con vida.
La entrega de la recompensa se pactó para el pasado viernes en la plaza Cívica de la zona de El Kenko, lugar que fue cercado por personeros de la Fiscalía y la Policía, sin embargo los secuestradores no se hicieron presentes.
Paralelamente el Ministerio Público rastreó las llamadas realizadas desde una vivienda en la zona de Senkata, la cual fue allanada encontrando a la niñera, a su hermano y a la menor dentro de un ropero.