Indagan si armas eran para cárteles de Brasil
July Rojas Medrano
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, dijo ayer que una de las hipótesis más importantes que maneja la Policía sobre las 75 armas de grueso calibre que fueron incautadas el viernes pasado en Santa Cruz, es que estaban destinadas a organizaciones criminales de Brasil donde actualmente hay una pugna de poder entre dos cárteles peligrosos.
La autoridad dijo también que el supuesto destinatario final de las armas en Bolivia —quien tiene orden de aprehensión— sería un militar del servicio pasivo. Ayer también se conoció que la pareja de esta persona fue detenida en Trinidad y trasladada hasta Santa Cruz.
Tras la incautación que hizo la Aduna Nacional de un arsenal de uso militar de origen norteamericano, un grupo de élite de la Policía, junto el Ministerio Público, inició acciones para profundizar las investigaciones sobre el caso.
Romero señaló a Los Tiempos que la pareja de uno de los propietarios de las armas —que está prófugo— fue aprehendida ayer pero no pudo prestar su declaración porque hasta horas de la noche continuaba en pleno traslado desde la ciudad de Trinidad hacia Santa Cruz.
En tanto, indicó que las otras seis personas detenidas que aguardan su audiencia de medidas cautelares “no aportaron” a la investigación cuando prestaron su declaración; sin embargo, la séptima implicada sería “clave” para la investigación, dijo.
Romero señaló que una de las hipótesis más fuertes que maneja la Policía es que el arsenal de armas tenía como destino final alguna ciudad de Brasil para abastecer a organizaciones criminales como el Primero Comando Capital (PCC) y el Comando Vermelho. A la fecha, existe un mercado ilegal de armas en el país vecino donde ambos cárteles mantienen una pugna de poder.
“La Policía más se inclina por la hipótesis de tráfico para proveer de armas a organizaciones criminales”, señaló Romero considerando que desde Santa Cruz existe una extensa frontera con Brasil por donde podrían haber salido las armas.
Por otra parte, también informó que los propietarios de la empresa transportadora se contactaron con las autoridades para informar que se presentarán de forma voluntaria con sus abogados para prestar su declaración y aportar a la investigación.
Considerando que el arsenal de armas estaba hábilmente camuflado en medio de material agrícola, se dispuso mayor control en este tipo de cargamentos que llegan a Bolivia.
Inventario de armas
El Ejército, según establece la Ley de Armas, se hizo cargo del armamento, por lo que el Ministerio de Gobierno aguarda el inventario que presentará para conocer a detalle qué características tienen las armas pero además qué otras elementos se hallaron en el container.
Desde 2013 hasta la fecha, según una publicación de El Deber, la Policía realizó al menos 10 operativos, logrando decomisar más de un centenar de armas de grueso calibre y también de municiones. Más de 30 personas cayeron en estos operativos, varias de las cuales fueron enviadas a la cárcel, aunque algunas obtuvieron medidas sustitutivas. Entre los detenidos hubo incluso policías, funcionarios de Correos, militares y varios civiles.
El 26 de enero de 2013, el Ministerio de Gobierno mostró las 31 armas de potencia letal con visores nocturnos y proyectiles, procedentes de Estados Unidos y destinados a Brasil. Días después, la Felcn también se incautó de 31 armas traídas de Estados Unidos para las mafias del narcotráfico.
El 30 de agosto de 2014, fueron detenidas cinco personas con armas que enviaba un boliviano desde Estados Unidos que estaban destinadas al PCC de Brasil.