Fiscalía ve anomalías en caso Da Silva
La Paz |
El fiscal departamental de La Paz, Edwin Blanco, responsabilizó al juez Sexto de Instrucción en lo Penal de La Paz, Fernando Rivadeneira, por la liberación del brasileño Antonio da Silva Costa, que el pasado jueves encabezó un asalto armado a la joyería Eurochronos de la ciudad de Santa Cruz.
“Él (Rivadeneira) no podía llevar ninguna audiencia pues no había una resolución judicial que determine la declinatoria de jurisdicción o que declare al juez del Beni incompetente”, señaló Blanco.
Explicó que el Juez Sexto incurrió en varias anomalías en el proceso, situación que fue dada a conocer en su debido momento por el fiscal Genera Quenta que atendió ese caso y dijo que se han solicitado los informes correspondientes para revisar la actuación del fiscal a cargo de este proceso.
Blanco aclaró que no es tarea de la Fiscalía señalar un procedimiento inmediato de audiencia para resolver un caso sino de la autoridad judicial que, además, debe remitir los antecedentes del proceso a un juzgado de sentencia.
Mencionó que el Ministerio Público fue diligente en la toma de decisiones en este caso y que el juez Rivadeneira asumió “competencia sin una resolución judicial que decline competencia”. Las repercusiones del caso surgen luego de que el 23 de junio de este año, Rivadeneira otorgó el beneficio de la detención domiciliaria a Da Silva Costa, que estaba encarcelado en el penal de máxima seguridad de Chonchocoro acusado de provocar lesiones graves a un oficial de la Policía.
Da Silva debía cumplir la medida sustitutiva en su domicilio ubicado en Guayaramerín. Una vez liberado, el pasado jueves encabezó un asalto armado a la joyería Eurochronos ocasionando la muerte de dos personas.
En la víspera el ahora juez Iván Perales también fue involucrado en la liberación del súbdito brasileño debido a que cuando oficiaba de abogado de Da Silva ocultó información sobre los antecedentes criminales de su cliente.
De esta manera el fiscal Blanco aclaró que no es tarea de la Fiscalía señalar un procedimiento inmediato de audiencia para resolver un caso sino de la autoridad judicial que, además, debe remitir los antecedentes del proceso a un juzgado de sentencia.
Según pudo constar El Deber, Da Silva Costa, el brasileño que supuestamente encabezaba a los atracadores logró salir de Chonchocoro y mudarse a Santa Cruz, presentando un contrato laboral falso.
El restaurante donde supuestamente trabajaba estaba cerrado hace más de seis meses. El lugar alquilado era la casa de la madre de su concubina. El Consejo de la Magistratura instruyó una auditoría para verificar la actuación del juez Rivadeneira en el caso Da Silva, considerando que existen denuncias de varias personas por irregularidades pero también contradicciones entre el juez y la Fiscalía.