¿Existe o no crisis en Bolivia?
Parece irónico que analistas económicos bolivianos piensen y quieran hacer creer que Bolivia está en crisis, cuando representantes internacionales como Ernesto Samper, (secretario de la Unasur) o el presidente de la CAF (Enrique García) elogian y resaltan los logros obtenidos por el Gobierno nacional en materia económica
En estas últimas semanas, se ha iniciado una campaña mediática para tratar de meter a la cabeza de las y los bolivianos la idea de que Bolivia está en crisis, lo que hace pensar que estos políticos y/o analistas económicos padecen de amnesia, puesto que olvidan la historia y realidad económica que vivió Bolivia antes de 2006.
Recordemos algunos acontecimientos suscitados entre los años 2000 al 2005, período en el cual se implementaron medidas como el “impuestazo”, que generaron diferentes conflictos sociales; el salario mínimo que estuvo congelado entre 2003 y 2005 (Bs440), cuando las personas no tenían dinero para ahorrar, además de indicadores como la tasa desempleo y el índice de pobreza que no se redujeron más al contrario incrementaron.
Sin embargo, a partir del 2006, con la implementación del Modelo Económico Social Comunitario Productivo (modelo hecho por bolivianos y para los bolivianos) se ha llevado adelante una mejor distribución de recursos, por lo que muchas familias han mejorado sus ingresos nacionales producto de las medidas económicas generadas en la última década, como ser el incremento del salario mínimo nacional, mayor facilidad al crédito productivo, las transferencias condicionadas como el Bono Juancito Pinto, Bono Juana Azurduy y la Renta Dignidad, entre otros.
Ahora las personas tienen mejores ingresos, una muestra de aquello es la facilidad de acceso a restaurantes y supermercados, evidente en que el consumo en ambos casos se han incrementado; en 2006 los restaurantes facturaban alrededor de $us 55 millones, pero al cierre de gestión 2015 las ventas alcanzaron la suma de $us 399 millones. Por otro lado, los supermercados incrementaron considerablemente el valor de sus ventas facturadas ($us 53 millones en 2006 a $us 299 millones en 2015).
Por otra parte, a pesar del contexto internacional adverso, entre enero y agosto de 2016, el sector privado nacional y extranjero continuó invirtiendo, creándose al menos 7.262 nuevas empresas privadas en Bolivia en este periodo (3 por ciento más que la gestión anterior).
Estos son algunos datos que muestran que Bolivia no está en crisis, las medidas preventivas que se han tomado desde la gestión 2006, han permitido afrontar de mejor manera la crisis internacional que ha contagiado a varios países de la región, sin embargo, la economía boliviana se ha mantenido sólida y sostenible.
Parece irónico que analistas económicos bolivianos piensen y quieran hacer creer que Bolivia está en crisis, cuando representantes internacionales como Ernesto Samper, (secretario de la Unasur) o el presidente de la CAF (Enrique García) elogian y resaltan los logros obtenidos por el Gobierno nacional en materia económica.
El autor es administrador de empresas.
Columnas de GUSTAVO DURÁN VALENZUELA