Romero señala que existe un “error” en el informe de la JIFE
El Gobierno cuestionó la posición de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) sobre el “incremento de la superficie total autorizada para cultivar hoja de coca”, al sostener que es un tema que no preocupa y que en abril próximo en la reunión de Viena se reunirá con el organismo internacional para aclarar el tema.
El pasado jueves, el representante de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (Unodc) en Bolivia, Thierry Rostan, presentó el Informe Anual 2017 de la JIFE, en el que sostiene que la Junta expresa su preocupación por la decisión de Bolivia, mediante la aprobación de la nueva Ley General de la Coca de 2017 y que permite que la superficie de las zonas de producción de arbusto de coca autorizadas prácticamente se duplique, hasta 22.000 hectáreas.
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, señaló que se valora el informe del JIFE en todos sus componentes porque reconoce muchos avances en materia de lucha contra el narcotráfico, pero luego señala “erróneamente que en función de nuevo del marco legislativo se habría impulsado un crecimiento de la superficie de hoja de coca en Bolivia”.
Agrega que según un estudio realizado por el Gobierno con el apoyo de la Unión Europea, la cantidad de coca que en 2012 se consideró suficiente para satisfacer la demanda para los fines descritos en la reserva interpuesta por el país era de 23.219 toneladas anuales, que podían obtenerse cultivando una superficie de unas 14.700 hectáreas.
ACLARACIÓN EN VIENA
El Ministro de Gobierno dijo que la JIFE tiene un problema de metodología en el manejo de cifras, toda vez que cuando se aplicó la 1008 habían 56.000 hectáreas de superficie de cultivos de coca y que ahora se tiene 20.000, además que hace siete años la superficie en la región por parte de Bolivia contaba el 20 por ciento del total y que en este momento representa el 10 por ciento.
“Nos viene bien porque seguramente aprovecharemos la reunión en Viena en el mes de abril para sostener una reunión con JIFE y poder hacer las aclaraciones que sean necesarias”.
EXPERTOS HARÁN EL ESTUDIO COCA-COCAÍNA
Bolivia y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc por su sigla en inglés) definieron desarrollar un estudio que determine la cantidad de hoja de coca que se necesita para lograr una cantidad de cocaína, denominada como “factor conversión coca-cocaína”.
Para este efecto, se prevé la aplicación de un protocolo “estándar” y metodología planteada por la Unodc y la asignación presupuestaria de más de 270.000 dólares. Al respecto, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, refiriendo las observaciones de la JIFE sobre la cantidad de hectáreas, señaló que éste es un buen motivo para discutir integralmente las decisiones políticas que fue adoptando Bolivia.
“Ahora estamos encargando un estudio de rendimiento de la conversión de coca-cocaína con Unodc, donde nosotros solamente acompañaremos la parte metodológica y expertos extranjeros harán ese estudio y eso es una muestra de transparencia en la políticas del Estado boliviano”, indicó.