Pese a su delicado estado de salud, obligan a Áñez a estar en audiencia
Pese a la situación delicada de salud de la expresidenta Jeanine Áñez, el Tribunal de Sentencia Anticorrupción Primero de La Paz llevó adelante la última jornada de alegatos obligando que la exdignataria participe, sin esperar la evaluación médica. En la oportunidad, la expresidenta denunció el amedrentamiento del que es objeto su hija Carolina Ribera y responsabilizó al Gobierno de cualquier daño o ataque que pueda sufrir. El juicio se reanuda este viernes desde las 10:00 de manera virtual.
“El Tribunal obliga a #JeanineÁñez a seguir la audiencia virtual en estado de adormecimiento, por la medicación anti hipertensiva y ansiolítica que recibe por su delicada salud. La Procuraduría se burla y presiona condena; la defensa fue multada por reclamar ciolación de DDHH”, refiere un mensaje en el Twitter de la expresidenta.
En este periodo de alegaciones de la defensa de los exjefes militares, la exmandataria reflejó en varias oportunidades la precariedad de su salud. Ante esta situación, el presidente del Tribunal Germán Ramos recurría a los galenos designados por Régimen Penitenciario para que evalúen a Áñez.
Entre las respuestas que se dio al juez, está que tuvo una contractura en el cuello producto de la tensa situación y que está consciente y puede continuar con la audiencia. También se dijo que está bien y puede continuar, porque las afecciones que registra no afectaron a ninguna de las enfermedades de base.
Pide descansar
La situación delicada de salud de Áñez se reflejó en dos ocasiones que dejó la sesión. Fue consultada sobre su estado e indicó que estaba con sueño por los medicamentos que le habían suministrado.
“Presidente, debido a la crisis, estoy muy cansada. Pedí que me pueda recostar porque tengo mucho sueño, no sé si realmente pueda estar atenta a la audiencia porque lo que quiero en este momento es dormir”, señaló la expresidenta ante consulta del juez Ramos.
Este hecho fue cuestionado por el abogado de la Procuraduría, quien señaló que durante todo el proceso la expresidenta presentaba dolencias, poniendo en duda su delicado estado de salud.
Ante el estado de salud de Áñez, en uno de esos momentos el Tribunal determinó un receso de una hora para que la exmandataria recupere fuerzas y poder continuar.
Al promediar las 21:00, Áñez solicitó la palabra e indicó que no estaba en condiciones de continuar en la audiencia, pero el juez Ramos pidió una nueva valoración y preguntó si podía continuar una media hora, a lo que los encargados de salud indicaron que sí.
Amenazas
Concluidos los alegatos de la defensa de militares, la expresidenta solicitó la palabra para denunciar que la abogada del Senado estaría involucrada en un plan para impedir la salida de Ribera del juzgado.
“Acuso públicamente: cualquier cosa que le pase a mi hija es responsabilidad de los miembros del Gobierno, de la parte acusadora, que no están conformes con llevar este proceso de la manera como están llevando, sino que quieren amedrentar a mi hija. Y todo lo que le vaya a pasar es responsabilidad de ellos”, señaló Áñez en la audiencia, luego de que su defensa denunció la exhibición del mensaje por parte de la representante legal de Andrónico Rodríguez.
A la conclusión de la réplica de las partes, el Presidente del Tribunal decretó un receso hasta las 10:00 de hoy.
Juez escuchará la última palabra
En la presente jornada, el Tribunal Primero de Sentencia Anticorrupción de La Paz continuará con la audiencia del juicio por golpe de Estado II y se prevé la visita a los centros penitenciarios para escuchar “la última palabra” de cada uno de los acusados. Éstos podrán contar con la presencia de un abogado.
Primero se acudirá a la cárcel de Miraflores, donde se encuentra recluida la expresidenta Jeanine Áñez, y posteriormente al penal de San Pedro, donde guardan detención preventiva los exjefes militares.
Concluidos todos estos aspectos, el Tribunal de Sentencia procederá con la emisión de la resolución respectiva.
Abogados de militares piden fallo de absolución
En la víspera, los abogados de los exjefes militares Flavio Arce San Martín y Jorge Pastor Mendieta, Roger Valverde y Javier Peñaloza, respectivamente, demandaron al Tribunal de Sentencia Anticorrupción Primero de La Paz, absuelva a sus defendidos.
Los legistas, durante su explicación, observaron que la parte acusadora no pudo probar de manera fehaciente que las autoridades castrenses incurrieron en los delitos de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes.
De acuerdo con la parte acusadora, los exjefes militares estarían involucrados de manera coordinada para facilitar la asunción al mando de la entonces senadora Áñez.
Uno, que habría instruido que se saque la medalla presidencial custodiada en el Banco Central del Bolivia (BCB); la otra autoridad militar, autorizar el vuelo de aviones y helicópteros.
Ante estas sindicaciones, la defensa en el caso de la medalla, el abogado Valverde, desvirtuó este aspecto al señalar que quien autorizo este extremo era el Jefe de la Casa Militar, de dependencia directa de la Presidencia y Ministerio de la Presidencia, sin relación alguna con el Comando de las Fuerzas Armadas.
Sobre los vuelos, Peñaloza refirió que el entonces comandante de la Fuerza Aérea, Gonzalo Terceros, tenía la tuición de autorizar vuelos y helicópteros que operan esta fuerza.