Celebramos a Cochabamba con esperanza
No son buenos tiempos precisamente para celebrar una fiesta cívica. Una vez más, el conflicto político opaca los ánimos de los bolivianos. Cochabamba se encuentra, en vísperas de la conmemoración de su efeméride departamental, sin poder disimular las tensiones que se han desatado en el país, y que al parecer se acentuarán en las siguientes semanas, sobretodo en torno al 10 de octubre.
Toda una prueba para los líderes políticos del país y la ciudadanía. Sólo resta esperar que unos y otros den talla y seamos capaces de renovar esperanzas y valores para el presente y el mañana.
En este Especial por el 14 de Septiembre, prestamos atención a expertos nacionales e internacionales que justamente destacan la singular cualidad de nuestro departamento, que constituye un centro geoestratégico de máxima importancia, tanto en Bolivia como en el subcontinente. Militares y diplomáticos han relievado esa característica desde hace casi 90 años. Es el centro del corazón sudamericano, punto de confluencia de las principales cuencas (río de la Plata, Amazonas y Titicaca). Es por ello, espacio de encuentro o choque de las influencias que vienen desde esas zonas.
Se ha explicado que Cochabamba influye política y económicamente en el resto del país y más allá. Diversos hechos históricos parecen respaldar esas hipótesis. Allí suman desde convulsiones sociales como la “Guerra del Agua” y diversos golpes de Estado, hasta la presencia cocalera en el Chapare.
Resulta también un eje de integración que articula comunicaciones áreas, terrestres y fluviales cuyos alcances sorprenden. Desde Puerto Villarroel se puede llegar al océano Atlántico y el aeropuerto de Chimoré es considerado un elemento estratégico de despliegue militar. A eso se suman los diversos corredores interoceánicos de integración que pasan por esta tierra. Un motivo –dicen los analistas–para valorar su cualidad de zona destinada a tener la sede de gobierno de Bolivia.
Cochabamba también tiene su personalidad irrepetible y única, con una identidad plurifacética que representa a una inabarcable variedad creativa de talentos.
Conscientes de que la moda contemporánea apenas aborda esta riqueza como estilo y no se apropia de nuestra herencia cultural, la revista OH! contactó a un grupo de destacados diseñadores cochabambinos para reivindicar nuestras tradiciones a través del diseño exclusivo de un outfit inspirado en nuestra gente e historia.
El resultado de su proceso fue capturado por nuestros fotógrafos en locaciones emblemáticas de la ciudad. Se las presentamos como regalo por nuestro Aniversario.
Que este número de OH! nos recuerde que hemos sido bendecidos no sólo por el destino y por una naturaleza pródiga, sino además por una ubicación privilegiada en el continente. Que somos capaces, talentosos, combativos y el futuro de nuestra región está en nuestras manos.
Felices fiestas, cochabambinos. ¡Que viva Cochabamba y su gente!
PAULA MUÑOZ ENCINAS
Editora OH!