Pie plano, identificar a tiempo para corregir las pisadas
El pie plano es una afección frecuente que si se lo identifica a tiempo se lo puede corregir con tratamientos sencillos y así evitar problemas posteriores de dolor de pies que pueden impedir realizar largas caminatas y ejercicios.
Esta alteración sólo se puede corregir hasta los 12 años, lo ideal es detectarlo entre los primeros años tras iniciada la caminata.
Un pie plano se diferencia de uno normal, porque el arco que se forma en la planta del pie es más reducido.
“El pie plano es la ausencia del arco plantar y esto se debe a varios factores, el principal es por un tema netamente de elasticidad y eso es normal. Haciendo ejercicio y usando una buena plantilla se corrige hasta los 12 años”, señala el traumatólogo Luis Bazán.
Es normal que los bebés tengan pies planos. La acumulación de grasas junto con la debilidad de los ligamentos hacen que los pies de los bebés no presenten el arco en su planta, la misma que se desarrolla poco a poco a medida que la musculatura de los pies del bebé se va fortaleciendo.
Bazán aconseja que a partir de los dos años y medio de edad los padres deben estar pendientes de la estructuración del arco de los pies de sus hijos. Sin este arco, los niños caminan apoyando toda la planta del pie en el suelo, cuando deberían apoyar solamente la punta, el talón y el borde externo de los pies.
Rojas explica que es conveniente una evaluación a partir de los cuatro años de edad, puesto que antes los niños presentan una almohadilla natural en el pie que da un falso pie plano.
“Dolor intenso en el pie, que impide un desempeño pleno a nivel deportivo o recreativo (correr, saltar, caminar trechos largos) o que se mantenga de pie por largos it; además, desgaste anormal del zapato, desviación de la pisada (comunmente tipo patito) o dolor en las rodillas”, son algunos de los síntomas de esta afección, comenta Rojas.
Diagnóstico
Es recomendable asistir a un especialista para que realice el diagnóstico adecuado. Bazán comenta que lo último en tecnología es el pasillo de marcha que permite marcar la posición del pie y el plantoscopio electrónico donde se marca las fases que tiene la deformidad del pie.
Existen diversos ejercicios de fortalecimiento y ahora hay plantillas moldeadas de acuerdo al problema que tiene el paciente.
Prevención
“Dejar a los niños caminar descalzos en distintas superficies como el pasto, arena y alfombras con texturas diversas ayudarán a que las estructuras anatómicas se fortalezcan y se desarrollan normalmente”, señala la fisioterapeuta.
Explica que cuando ya se detecta que un niño tiene pie plano, en fisioterapia se realizan ejercicios específicos que fortalecen los ligamentos y músculos para formar el arco plantar. Entre ellos, caminar de puntitas, de talones, agarrar canicas con los pies y jugar con los dedos sosteniendo objetos.
Recalca que la principal causa del pie plano es la debilidad de ligamentos y músculos del pie. “Esto quiere decir que si no se trabajan estas estructuras que forman el arco plantar, podemos con los años adquirir el pie plano”, finaliza.
CONSECUENCIAS
Con la ausencia de la bóveda plantar, el peso del cuerpo no se distribuye correctamente y se direcciona al arco haciendo que este se aplane. Por ello, se siente mucho dolor y molestia y no puede caminar largos trechos, correr, mantenerse de pie por tiempos prolongados. Muchas veces el dolor llega a la rodilla, cadera y espalda, produciendo alteraciones posturales.