Polémica por la muerte de una osa polar que fue separada de su compañero
Szenja, una osa polar falleció inesperadamente a mediados del mes pasado en el parque SeaWorld de San Diego. Su muerte aún genera polémica debido a que su repentina muerte es relacionada a la separación de su compañero Snowflake, con el que tenía viviendo más de 20 años.
La osa polar nació en un zoológico alemán hace 21 años, pero desde su primer año de vida fue trasladada a SeaWorld en San Diego, ahí se encontró con Snowflake.
Sin embargo, y a pesar de las protestas de activistas, la administración de SeaWorld decidió trasladar a Snowflake al zoológico de Pittsburgh para servir de semental.
Después de esto, los encargados observaron durante una semana la pérdida de apetito y energía de Szenja de forma repentina, hasta que llegó el día de su muerte el 11 de abril; lo que fue un shock para el personal del parque.
“Después de perder a su compañero de 20 años cuando SeaWorld envió Snowflake al zoológico de Pittsburgh con el fin de reproducir más osos polares miserables, Szenja hizo lo que cualquiera haría al perder toda esperanza: se dio por vencida“, señaló el vicepresidente de PETA, Tracy Remain.
“Esto debería ser un llamado de atención a SeaWorld: dejen de criar y enviar animales a los alrededores, cierren las exhibiciones de animales y llévenlos a santuarios. Hasta que no lo hagan, esta nave seguirá hundiéndose”, añadió.
Los osos polares pueden vivir unos 18 años en su hábitat y de 20 a 30 años, o incluso más, en cautiverio.
El ejemplar más viejo de oso polar en Estados Unidos, una hembra llamada Uulu, murió el viernes en el zoológico de San Francisco. Tenía 36 años.
