América Latina en rojo en el mapa mundial de peligros para la salud
La mayoría de las enfermedades infecciosas emergentes que afectan a los humanos son zoonosis, es decir, con virus que se originan en mamíferos salvajes y se transmiten de forma natural a las personas. América Latina es un caldo de cultivo de virus que podrían dar lugar a una futura pandemia global, según los mapas de riesgo elaborados por EcoHealth Alliance, una organización sin ánimo de lucro dedicada a la prevención de enfermedades.
Murciélagos, primates y roedores, entre otros, son algunos de los animales que contagian el ébola, el VIH o el síndrome respiratorio agudo y grave (SARS) a los seres humanos.
Hasta ahora, pocos métodos permitían identificar qué especies albergarán con más probabilidad los futuros virus humanos o qué virus serán capaces de atravesar las fronteras entre especies, explica la agencia Sinc.
Este último estudio, publicado en la revista Nature, revela que el número total de virus que infectan una especie determinada y la probabilidad de que se convierta en zoonosis, es predecible.
Los investigadores de EcoHealth Alliance analizaron los virus que portan los mamíferos, como los murciélagos, los simios y los roedores y observaron cómo interactúan con los humanos en distintas regiones del mundo.
Los autores creen que este tipo de mapas de peligro pueden ayudar al mundo a prepararse para cuando se produzca la próxima infección de animales a humanos, para prevenir futuras crisis como la del Sida, el Ébola o la gripe aviar.
Así, EcoHealth Alliance elaboró una base de datos con más de 2.800 asociaciones entre virus y mamíferos y, tras su análisis con modelos matemáticos, ha tratado de definir qué especies tienen un riesgo potencial más alto de ser el origen de una infección zoonótica.
"De acuerdo al estudio la región del mundo que claramente engendra un mayor riesgo por la presencia de estos animales es la de la Amazonía, una de las de mayor biodiversidad del planeta, que incluye a Brasil, Perú, Bolivia, Colombia, Venezuela, Ecuador, Guyana, Guayana Francesa y Surinam", señala la BBC.
Los investigadores detectaron 586 especies virales analizadas, 263 (el 44,8 por ciento) se detectaron en seres humanos, y 188 (el 71,5 por ciento de los virus humanos) se definen como zoonóticos, es decir, que se han detectado al menos una vez en humanos y al menos una vez en otra especie de mamíferos.
Pero ¿qué hace que algunas especies sean mejores huéspedes que otras? “Depende del número total de virus de una especie concreta o de la diversidad de los virus, que es influenciada por el rango geográfico de la especie, por el solapamiento con otros mamíferos, el tamaño del cuerpo y la orden a la que pertenece”, señala a Sinc Kevin Olival, autor principal del trabajo.
Según el estudio, otros factores que influyen en la transmisión de los virus de mamíferos a humanos son la cercanía entre unos y otros, y la cantidad de coincidencias con las poblaciones humanas y las áreas urbanas.
Combinando todos estos datos, estimaron qué especies portan los virus con un mayor potencial de infectar al ser humano y las localizaron en un mapa para identificar zonas de riesgo.
Murciélagos, los más peligrosos
Los resultados de la investigación señalan a los murciélagos como el mayor reservorio de virus con capacidad para infectar a los humanos; un dato que no sorprendió a los investigadores, ya que está demostrado que de estos animales surgió el último brote de ébola, entre otros. Los primates y los roedores serían, a mayor distancia, los siguientes en esta lista de potenciales orígenes de infecciones zoonóticas.
El mapa también señala que los virus con mayor potencial zoonótico presentes en murciélagos son más prevalentes en Sudamérica y Centroamérica.
Según el estudio, cada especie de murciélago puede ser portadora de 17 enfermedades zoonóticas, que son aquellas que ya infectaron tanto a animales como a humanos.
En el caso de los primates y roedores el número de infecciones zoonóticas por especie es de 10.
Del mismo modo, este tipo de patógenos presentes en primates se localizan principalmente en América Central, África y el Sudeste Asiático, mientras que los que se albergan en roedores, aunque es global, está también concentrada en América del Sur.
Para los científicos, predecir qué virus son más probables de propagarse de animales a seres humanos podría ayudar a controlar las enfermedades emergentes y prevenir futuros brotes. El estudio permitiría así aportar información a los programas mundiales sobre la identificación de nuevos virus zoonóticos y evaluar su posible amenaza para la salud humana.
IMPACTO HUMANO
"El mensaje de este estudio es que las enfermedades están emergiendo por el impacto humano sobre el medio ambiente. Nuestra respuesta es: Minimicemos nuestro contacto directo con la vida silvestre, tanto por caza como por destrucción del hábitat", le dijo el doctor Kevin Olival, uno de los investigadores del estudio a James Gallagher, periodista de la BBC.
James Lloyd-Smith, de la Universidad de California, en Los Ángeles, puntualiza que "aunque la mayoría de las pandemias son zoonosis, la mayoría de los zoonosis no causan pandemias".
"Es mejor usar las predicciones para darle prioridad a la investigación y a los esfuerzos de monitoreo de virus, pero no para tomar decisiones sobre políticas específicas", le dijo a la BBC.
Entretanto, la próxima investigación de EcoHealth Alliance se centrará en las aves, para identificar potenciales fuentes de infecciones zoonóticas como la gripe aviar.