Quillacollo aún no tiene UTI; instalará “domos”
A cinco meses de la pandemia de Covid-19, la Alcaldía de Quillacollo aún no logró implementar una unidad de terapia intermedia para tratar a pacientes moderados y críticos pese al aumento de casos.
El secretario de Desarrollo Humano, Pablo Hinojosa, indicó ayer que se descartó instalar el área en el hospital Benigno Sánchez porque no reúne las condiciones y mencionó que se trabaja para habilitarla en el centro de salud Villa Urkupiña.
“Ya hemos hecho la adquisición de cuatro camas para instalar la sala, nos faltaría respiradores no invasivos. Hemos decido descentralizar la atención de pacientes con coronavirus a tres centros centinela que son El Paso, Villa María y Urkupiña para no saturar el hospital”, precisó.
Hinojosa adelantó que se evalúa la contratación de médicos internistas y profesionales de otras áreas para cubrir el déficit y las bajas.
“Hasta la siguiente semana tendremos con precisión la cantidad de requerimientos que nos harán los establecimientos de salud”, agregó.
Por su parte, el director del nosocomio, Julio Orozco, explicó que para superar el caos que se generó en el único hospital de segundo nivel del municipio y aseveró que se propuso la implementación de “domos” para aislar casos sospechosos para evitar contaminar las salas de otras patologías.
“En una reunión con directores de los siete centros de salud determinamos apoyar y reforzar con equipamiento y contratación personal para los centinelas. Hemos solicitado 60 camas para empezar”, afirmó.
Remarcó que se hacen ajustes al plan para aliviar el colapso y reorganizar el trabajo de más de un centenar del personal.