Gian-Carla Tisera: abrirse a otras culturas

La artista cochabambina Gian-Carla Tisera se encuentra grabando un disc o de salsa/bachata/merengue con un coproductor dominicano, Arturo Peña, graduado de Berklee School of Music. Esta producción será lanzada en marzo del 2017 en Sounds of Brazil, un espacio de conciertos popular en Manhattan (EEUU).

Aunque posiblemente esté listo para fin de año, el disco “SOQ Project” verá la luz recién el 2017 “por los Grammys. Marzo es la primera fecha para entrar a los Grammys del 2018. Publicaremos dos o tres videos musicales antes de lanzarlo”, dice la artista desde Nueva York, donde reside actualmente. “Tenemos más de 23 músicos del Caribe y Latinoamérica grabando... Toda música original”, explica. 

Con esta artista, resulta muy fácil hablar de cualquier tema, política o el clima, y sus conceptos siempre están cargados de sensibilidad. “Romantizo todo”, dice mientras gentilmente envía unas fotos de una tormenta que se arma en el cielo de Nueva York, al atardecer de este 12 de agosto, mientras completábamos la siguiente entrevista pensada inicialmente para ser publicada el Día de la Patria Bolivia.

“Me hace recuerdo a Cocha cuando hay tormentas en el verano –dice de las fotos enviadas--. Siempre me paraba en la ventana a mirar las nubes y la lluvia sobre las montañas”.

Para Gian-Carla, Nueva York es su padre y Bolivia su madre, y asegura amar a esta ciudad estadounidense más que a cualquier otra, porque es un espacio muy latino. “Es bello. La gente es bella, muy solidaria y abierta. Y aman Bolivia”, escribe a través del messenger poco antes de entrar al estudio de grabación.

Aunque pasa más tiempo allá que acá, Tisera asegura que no vive fuera de Bolivia realmente. “Entre el 2012 y 2015 pasé periodos largos en Bolivia, hasta tuve departamento en Cochabamba. Entre el 2015 y 2016 no he podido regresar. Antes del 2012 tuve cuatro años sin regresar, antes de eso iba todo el tiempo. La idea siempre fue tener un pie allá y uno aquí”, sentencia.

Actualmente ¿cómo ven en Estados Unidos a Bolivia y a los artistas bolivianos como Usted?

En general no es muy común encontrarse con bolivianos en EEUU, excepto en Washington y Virginia. A comparación de otras comunidades migrantes en EEUU, somos muy pocos. Mi experiencia es que la gente siente mucha curiosidad de saber cómo somos y de conocer nuestra cultura. Siento que la percepción que otros tienen de mí es que soy exótica, algo muy diferente, especialmente con mi carrera en la música y como artista. Siento que celebran a mi país y que lo conocen un poco más a través de mi persona, de la música o de mis relatos.

Quiero expresar que todas las comunidades que me han rodeado, norteamericanas y de inmigrantes, se han solidarizado con el pueblo boliviano por medio de nuestra música, y como artista puedo decir que una de las satisfacciones más grandes que he sentido en EEUU es el ser apoyada por ser una artista boliviana.

Usted es una boliviana que ha conseguido bastantes éxitos fuera del país, ¿cómo se siente por esto?

Siento gratitud y humildad… Y me siento más segura que nunca que con esfuerzo, disciplina y visión se puede lograr todo. También es importante rodearse de la gente correcta, gente que te ayude a crecer y que crea en ti verdaderamente.

Hace años que Usted vive fuera del país, esa lejanía ¿cómo le permite ver a Bolivia actualmente?

El estar lejos de mi país me ha acercado más a mi país y me ha hecho más sensible a los problemas sociales y a la increíble belleza de Bolivia. En la lejanía también existe la constante necesidad de estar conectada a mi tierra, lo cual ha inspirado mucho mi camino y mi música.

¿Cómo ve Usted actualmente a Bolivia?

A Bolivia la veo con muchas ganas de progresar y a las nuevas generaciones las veo y siento muy progresistas y abiertas, con una forma moderna de verse a sí mismas como bolivianas y de valorar nuestra riqueza natural, folklórica y cultural.

Yo quiero ver una Bolivia feliz, con pasos firmes al progreso social, con sus culturas enlazadas entre sí. Lo que no quiero ver es una Bolivia enojada, no quiero ver una Bolivia rota, no quiero ver una Bolivia descompuesta porque siempre sostengo que tenemos y somos un gran país.

¿Qué es lo que menos le gusta de la cultura boliviana y si pudiera cómo cambiaría eso que le disgusta?

Yo como artista tengo un compromiso de llevar la cultura y el talento boliviano donde quiera que voy. No me gusta que la cultura boliviana no haya sido exportada al mundo como otras culturas latinoamericanas, poseyendo tanta riqueza cultural y artística. El talento que existe en Bolivia es maravilloso, la cultura boliviana es grandiosa y me gustaría que el mundo pueda conocerla y apreciarla.

¿Qué cree que le hace falta a Bolivia para ser un país mejor?

Nos falta ser más abiertos con otras culturas y con otras formas de actuar y pensar. A medida que Bolivia se abra al mundo, el mundo se abrirá a Bolivia y tendremos un mejor país.

¿Qué es lo que más le gusta de la cultura boliviana?

Lo que más me gusta de Bolivia es la preservación de la cultura indígena que está plasmada en todos los rincones del país. La energía cultural y telúrica de Bolivia y su gente es tremendamente poderosa y en mi forma de sentir y percibir, la cultura está presente en todo. El año pasado fui desde Cochabamba a Potosí por tierra, para finalmente conocer las minas. Fue uno de los viajes más hermosos de mi vida y pude apreciar a los mineros y la cultura que existe dentro de la mina, por ejemplo. Entrar en la mina me cambió la vida, fue transcendental para mí, como boliviana, artista y ser humano. Muchos países celan la riqueza folklórica que tenemos como país, y en la lejanía amo más estos aspectos que a veces viviendo dentro de Bolivia no se aprecian de igual manera.

¿Qué es lo que más extraña de Bolivia?

La cultura y la riqueza natural, adoro los campos, las montañas y las selvas. Extraño el olor de Cochabamba después de la lluvia. Extraño almorzar los domingos con mi familia y extraño mucho a los brillantes músicos bolivianos con los que he creado música durante mis giras. Tengo un círculo pequeño de amigos entrañables que también me hacen mucha falta.

“A Bolivia la veo con muchas ganas de progresar y a las nuevas generaciones las veo y siento muy progresistas y abiertas, con una forma moderna de verse a sí mismas como bolivianas y de valorar nuestra riqueza natural, folklórica y cultural.”

(*) La autora es periodista.