Camino despejado en Israel para que el Gobierno apruebe la tregua en Gaza
¿Inesperada y dramática crisis que retrasa e incluso puede evitar el acuerdo de tregua anunciado solemnemente por Joe Biden y Donald Trump o un esperado y último forcejeo negociador que simplemente aplaza la reunión del Gabinete israelí para aprobarlo?
La respuesta a esta inquietante pregunta surgida a media mañana de ayer a raíz del comunicado de la oficina del primer ministro, Benjamin Netanyahu, acusando a Hamás de crear una “crisis de última hora que evita el acuerdo” llegó por la tarde, cuando las dos partes y los mediadores confirmaron que los últimos obstáculos se solventaron mientras en el terreno continuaba la ofensiva aérea israelí en la Franja de Gaza.
Los últimos obstáculos creados en el último momento en la negociación entre Israel y Hamás han sido solucionados ayer por la tarde, por lo que se mantiene el plan anunciado el miércoles para iniciar la tregua el próximo domingo. El Gabinete israelí tiene previsto reunirse hoy por la mañana para aprobar el acuerdo que ponga fin a 15 meses de guerra en la Franja de Gaza.
La noticia supone un alivio tras la inesperada crisis que a lo largo de toda la jornada había retrasado, e incluso amenazaba con poder evitar, el acuerdo anunciado solemnemente por Joe Biden y Donald Trump. Todo ha quedado en un último y esperado forcejeo negociador que simplemente aplaza la reunión del Gabinete israelí para aprobarlo.
A cambio de la vuelta de los rehenes —33 en la primera fase de tregua extendida en seis semanas a partir de este domingo—, Israel se comprometió a la retirada militar de las zonas en la Franja de Gaza que ocupa desde la masiva operación lanzada en respuesta al ataque armado del 7 de octubre de 2023 en el sur del país y a liberar a más de mil presos palestinos.
Sobre este último aspecto, había girado la discrepancia de última hora entre las dos partes. De hecho esta madrugada, la oficina del primer ministro señaló que Netanyahu habló con su equipo negociador en Doha y denunció: “Contrariamente a una cláusula expresa que otorga a Israel el derecho de veto sobre la liberación de asesinos en masa que son símbolos del terrorismo, Hamás exige determinar la identidad de estos terroristas”.
Amenaza
El ministro ultranacionalista israelí Itamar Ben Gvir amenazó con abandonar el Gobierno de coalición liderado por Benjamín Netanyahu, a pocas horas de que el Ejecutivo se reúna para votar la implementación del acuerdo de alto el fuego y liberación de rehenes con Hamás.
Ben Gvir aseguró, en una rueda de prensa ayer, que el acuerdo permitiría al grupo islamista rearmarse y volver a atacar a las comunidades israelíes fronterizas con la Franja.
“Si la guerra contra Hamás se retoma (...) volveremos al Gobierno”, anunció el ministro de Seguridad Nacional.
Ayer, cuando estaba previsto que el Ejecutivo israelí se reuniera para votar el acuerdo, anunciado el miércoles por Catar, el ministro ultraderechista de Finanzas, Bezalel Smotrich, amenazó con abandonar el Ejecutivo si Israel no se compromete a continuar con la guerra una vez termine la primera fase de la tregua.
Según el borrador del acuerdo, el alto el fuego contempla tres fases de 42 días cada una.
En la primera fase se liberarían a 33 rehenes (mujeres, menores de edad, mayores de 50 años, enfermos y heridos), mientras que los hombres menores de 50, incluidos los soldados, no se liberarían hasta una segunda fase, en la que Israel además debería ceder el control del Corredor Filadelfia (la frontera de Gaza con Egipto).
Está previsto que el Gobierno israelí se hoy para dar luz verde al acuerdo.
Hutíes se suman al cese de fuego
El líder de los rebeldes hutíes del Yemen, Abdelmalik al Huti, anunció ayer su respaldo al alto el fuego en la Franja de Gaza acordado por Israel y Hamás, pero amenazó con reiniciar sus ataques contra territorio israelí si el Estado judío la vulnera y retoma su ofensiva contra el enclave palestino.
En un discurso televisado, Abdelmalik al Huti mostró su apoyo a la tregua anunciada el miércoles por Catar y alineó la postura de los insurgentes yemeníes a la decisión del grupo islamista palestino Hamás y las demás facciones palestinas.