Asalto a Eurochronos, el más fatal en 50 años
El atraco armado a la joyería Eurochronos de Santa Cruz que dejó cinco personas fallecidas se constituye en el hecho más violento en los últimos 56 años, marcando un hito histórico entre los actos delictivos que enlutaron al país.
Un 28 de julio de 1961, tres empleados de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) fueron asaltados y despojados, de forma violenta, de una remesa de 2,8 millones de bolivianos que trasladaban para pagar los salarios de los mineros de Catavi y Siglo XX.
Este atraco, en el que participaron civiles en complicidad con policías, se perpetró en la población de Calamarca, distante a 50 kilómetros de la ciudad de La Paz. El vehículo en el que se llevaba el dinero fue interceptado y los empleados de Comibol asesinados. El atraco de Calamarca inspiró al director Paolo Agazzi, para llevar la historia a la pantalla grande.
Transcurrió un poco más de medio siglo para que se registre otro asalto de gran magnitud que causó conmoción en la población cruceña, cuando un grupo de cuatro civiles intentó robar la joyería Eurochronos en pleno centro de la ciudad. El hecho terminó en una sangrienta balacera que utilizó a mujeres como escudos humanos.
En medio de ambos hechos, existen otros tres atracos con características similares.
El 30 de marzo, un grupo de delincuentes, con armas de guerra interceptó un vehículo blindado de Brinks, que llevaba una remesa, y después de arrojar una granada de guerra, redujeron a los custodios para huir con un botín estimado en al menos 1,3 millones de dólares.
Dos años atrás, otro hecho delictivo estremeció al país. El 19 de agosto de 2015, delincuentes armados protagonizaron otro millonario atraco en la ciudad de La Paz, tras asaltar a los trabajadores de la cooperativa minera Kami de Cochabamba, cuando llevaban una remesa de al menos 1,7 millones de bolivianos para cancelar los sueldos de sus afiliados. Cuatro hombres armados descendieron de un vehículo y comenzaron a disparar, dejando dos personas muertas.
Otro asalto violento en el que estuvo involucrado un policía ocurrió en la avenida Kantutani de la ciudad de La Paz en 2001. El objetivo era una remesa de más de medio millón de dólares que era trasladada por la empresa de transporte de valores Prosegur. Los atracadores, que asaltaron el vehículo a las siete de la mañana, asesinaron a tres personas.
Blas Valencia Campos, entonces coronel de la Policía, planificó y ejecutó este atraco con el apoyo de otro oficial de la institución, Freddy Cáceres, además de personas civiles.
Policías
En dos atracos de magnitud, hubo policías involucrados
2,8 millones de bolivianos fue lo que se llevaron en el atraco que se perpetró en la población de Calamarca en 1961.
1,3 millones de dólares se llevaron los atracadores a un vehículo blindado de Brinks, el pasado 30 de marzo en Santa Cruz.
DEMORARON SÓLO 7 MINUTOS
Asaltaron a la misma joyería en 2014
El 2 de octubre de 2014, cuatro delincuentes fuertemente armados asaltaron la joyería Eurochornos, ubicada en la esquina de las avenidas Irala y Velarde, y se llevaron 1,5 millones de dólares en relojes caros, sin que la Policía hasta la fecha hubiera dado con los autores.
El miércoles 26 de octubre de 2016, cuatro sujetos ingresaron a la joyería Imperio (barrio Equipetrol) pertrechados con armas de grueso calibre, redujeron al personal y se llevaron todas las joyas que había en los mostradores.
La similitud en ambos hechos fue registrada por el Ministerio de Gobierno. En los dos casos, los autores fueron delincuentes brasileños, por lo que no se descarta que se trate de la misma banda.
Según el ministro de Gobierno, Carlos Romero, Antonio Abdón Da Silva Costa, uno de los atracadores que fue beneficiado con medidas sustitutivas por un juez, participó en el atraco a la joyería Imperio, en Santa Cruz el año pasado.
POR BS 400 MIL
El asalto a remesas de jubilados
Villa Dolores, en la ciudad de El Alto, fue el escenario de otro violento atraco el 7 de mayo de 2009. Un grupo de malhechores se llevó aproximadamente 400 mil bolivianos que transportaba un vehículo blindado de la empresa Brinks, que eran parte de una remesa con destino a los jubilados.
La Policía reportó, en esa oportunidad, que el atraco sucedió en la sede de la Asociación de Jubilados del Magisterio.
Los criminales detuvieron a tiros el vehículo de transporte de valores y se llevaron el dinero, después de herir al conductor. El motorizado no tenía escolta policial. En esa oportunidad, señalaron que el atraco fue una acción "planeada cuidadosamente", considerando las herramientas que trasladaban los delincuentes.