La corrupción es caldo de cultivo para la infiltración del narco en la política
Según datos de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudc), el tráfico de drogas sigue siendo la forma más lucrativa de negocio para los delincuentes, ya que tiene un valor anual estimado de 320.000 millones de dólares. En 2009 la Unodc calculó que el valor anual aproximado de los mercados mundiales de cocaína y opiáceos ascendía a 85.000 y 68.000 millones de dólares, respectivamente.
Esta ganancia del narcotráfico sólo es posible si existe un sistema estatal que lo fomente y permita, es decir, un mecanismo de corrupción muy bien estructurado.
Para la criminóloga y experta en justicia criminal Gabriela Reyes, el principal mecanismo para que el narcotráfico se infiltre en los círculos políticos de jerarquía es la corrupción. El narcotráfico mueve muchísimo dinero y, por lo tanto, tiene plata para corromper a las personas, a la justicia, a la Policía y a las instituciones.
“La corrupción es el mecanismo más eficiente y que, además, funciona en todo el mundo, sino la droga boliviana no llegaría hasta Ámsterdam, Hamburgo o España. En consecuencia, este es el mecanismo, históricamente, que se ha aprobado como el más efectivo”, señala la experta.
Reyes asegura que el crimen organizado del narcotráfico en Bolivia tiene líneas conductoras determinadas. Una de las primeras, dice, es que el país es productor de la hoja de coca, que es la materia prima para la fabricación de la cocaína. Dándose, principalmente en tres países: Bolivia, Colombia y Perú. “Bolivia representa actualmente el 8%. En anteriores oportunidades, incluso representó hasta el 20% de toda la hoja de coca que se producía en el mundo”, indica.
Por lo tanto, sostiene la experta, al haber hoja de coca, hay producción de cocaína y eso está vinculado a los otros países que también son productores de la droga.
Droga y política
La relación del narcotráfico en la política se dio con notoriedad, sobre todo, durante las dictaduras militares. Y ya en una época más contemporánea estallaron los conocidos casos de las “narcofotos”, los “narcovínculos”, los “narcoaviones”.
“Estos casos tenían una relación muy estrecha de los ‘peces gordos’ del narcotráfico con gente ligada al poder. Como fue el caso de Marino Diodato, que era cuñado de Hugo Banzer Suárez”, según la criminóloga.
El tema de la economía ligada al narcotráfico, afirma Reyes, siempre jugó un rol relevante. Si bien no existe un cálculo de los porcentajes en el Producto Interno Bruto (PIB), siempre se supo que el tema de narcotráfico tiene un peso importante, a la par de otras economías ilícitas.
“El narcotráfico ha hecho millonaria a mucha gente. El caso de Roberto Suárez, que financió el golpe de Estado e impuso la dictadura de García Meza. Ofreció entregarse si Estados Unidos pagaba la deuda externa del país”, recordó la experta
Tecnología e IA
Para Reyes, la tecnología y la Inteligencia Artificial (IA) en la lucha contra el narcotráfico son esenciales. “Bolivia es uno de los pocos países que no utiliza de manera legal, no sé si lo hará de manera ilegal. El país no tiene establecido, por ejemplo, las escuchas telefónicas.
Cuando se tiene una aprobación del juez y de la Fiscalía para que se empleen, han logrado dar con mucha información en Estados Unidos, en Europa, en Brasil”, dice la experta.
La IA, afirma, tiene la capacidad de acumular una gran cantidad de información y de poder armar modelos para hacer prospectiva y hasta poder identificar con mayor precisión lugares, modos de operar. Añade, además, que el uso de la IA todavía está siendo más desarrollada, pero lo que se ha visto es que la tecnología y la inteligencia artificial son fundamentales para una lucha contra el narcotráfico más efectiva.
“En Bolivia se utilizan escáneres y otros elementos, pero todavía estamos en un nivel inicial en el uso de la tecnología. Los sistemas son muy básicos, cuando hay mucho más avanzados”, finalizó.
“Códigos de honor” de los narcos
Hay dos elementos que pueden ser parte de estos “códigos de honor” en el narcotráfico: el silencio y el secreto.
Para que el narcotráfico “pueda prosperar”, se requiere que los operadores cumplan estas dos reglas informales, principalmente. Si alguien rompe un secreto, lo mandan a matar. Eso se ve en el caso de los informantes. Otro ejemplo claro de estos mecanismos son los paraísos fiscales que garantizan silencio y secreto sobre los flujos de la plata que proviene de la actividad criminal, según la experta Gabriela Reyes.