Gonzalo Lema presenta su nueva obra policial “Hola, mi amor”
El escritor Gonzalo Lema presentará en los próximos días su nueva obra literaria titulada Hola, mi amor, que forma parte de la serie de aventuras de Santiago Blanco, el icónico personaje ficticio que creció con Lema.
La novela, publicada por Plural editores, encuentra a Santiago en Villamontes, un lugar donde se desata la pelea por el monopolio de los “locales de chicas alegres” (prostíbulos) y las rutas de la marihuana y la cocaína; casos que este protagonista debe investigar. Pero también el lector podrá inmiscuirse en la vida amorosa de Blanco.
Hola, mi amor es la continuación de Que te vaya como mereces (Premio L’H Confidencial 2017, novela negra; Barcelona, España). Un hombre sentimental, Dime contra quién disparo, Fue por tu amor, María y La reina del café son también novelas y cuentos del investigador Santiago Blanco, todos publicados por la misma editorial. Aunque Lema afirma que cada libro tiene su autonomía y pueden ser leídos en distinto orden a su publicación.
Los Tiempos conversó con el autor para conocer a detalle el proceso de Hola, mi amor.
Una obra más de su autoría que acaba de ser publicada, ¿podría contarnos un poco acerca de su novela?
Hola, mi amor es la tercera novela del investigador Santiago Blanco y sexto libro suyo, porque también tiene tres colecciones de cuentos. De alguna manera esencial, es la continuación de la novela Que te vaya como mereces. Terminando esa novela, Gladys, su novia, exprostituta en su juventud en Cochabamba, se va a Villamontes donde ya vive su hijo. Santiago Blanco, a los días, viaja a su encuentro. En Hola, mi amor ya vive con ella, con el hijo, la nuera y el nieto. Viven en una casa que les sirve de restaurante: Blanco fríe sábalos al mediodía y Gladys cocina sillpanchos en la noche. Pero en Villamontes se desata la pelea por el monopolio de los prostíbulos y las rutas de la marihuana y la cocaína, y Santiago Blanco debe investigar, porque como dice el fiscal, “es un investigador de raza”.
¿Por qué el título Hola, mi amor?
El título se debe al encuentro soñado por ambos en la juventud: encontrarse para vivir juntos. Ahora él tiene cerca de 60 años, ella más de 50. No viven en Cochabamba. Ella ya no es lo que fue, y él tampoco es policía. Son otras las circunstancias. Tienen que reinventar la vida. Pero se han amado desde que se vieron en el prostíbulo clandestino de la calle Calama. Por eso el título. Sin embargo, el título hace un giro y se distorsiona de manera horrible en la novela.
Blanco queda desconcertado. El lector, espero, también. Sólo a veces se concreta la vida soñada.
¿Qué van a encontrar los lectores entre las páginas de esta obra?
Mucha acción y mucha comida. Es un momento difícil en la bella ciudad del Chaco, y Santiago Blanco está en movimiento, pero además está tratando de entender su vida sentimental. La novela es ágil y entretenida.
En esta trama policial, ¿cómo descubre los escenarios y los personajes?
Los escritores de novelas y cuentos respondemos a impulsos. Por lo menos, nos sentimos mucho mejor cuando nos “cargamos” de la novela antes de escribirla. Trama, personaje, locaciones, etcétera, responden a esos impulsos que se generan por diversas razones: lecturas, comentarios, experiencias, anhelos… Yo he visitado Villamontes dos veces en mi vida, y siempre con alegría. Es una ciudad preciosa, planificada, de avenidas y calles anchas, parques, actividad económica y cultural, porque gran parte de la ciudad es museo debido a la guerra del Chaco. Por ejemplo: en el patio del magnífico mercado central está la casa del alemán donde se alojaba el presidente Salamanca, y donde los militares lo toman preso en el golpe de Estado de 1934. Está muy cuidada, y se le puede visitar y mirar del segundo o tercer piso del mercado.
¿Qué nos puede decir sobre Santiago Blanco? Es un personaje que está presente en títulos anteriores a éste.
Mis novelas y cuentos policiales tienen a Santiago Blanco de protagonista principal. Él es un exinvestigador de la policía, exalumno de Derecho en San Simón, exarquero de fulbito en el patio de la policía. Tiene un matrimonio brevísimo con la falsa rubia Marilú que se avergonzaba de que su novio, luego marido, fuera nadie. Pero el amor de su vida es Gladys, que tenía como nombre de guerra Soledad. Tiene 19 cuentos, es decir, 19 historia, más tres novelas, es decir, tres historias más. La primera de sus historias comienza a sus 31 años, ahora, en Hola, mi amor, tiene 58 años. Es un montón de vida.
¿Es quizá necesario leer las obras anteriores para entender ésta?
No necesariamente, pero mi ilusión es lograr que el lector sí lo haga. Santiago Blanco tiene su “Breve biografía literaria” escrita en colaboración con el lector nacional Luis H. Antezana. Eso indica que es un personaje de la literatura nacional que se codea con los hombres de carne y hueso. Cada libro tiene su autonomía, pero los vasos comunicantes con los restantes enriquecen su historia. El lector puede empezar por Hola, mi amor, si gusta, y luego caminar hacia atrás. Lo invito, cordialmente, a hacerlo.
Volviendo a los personajes, ¿alguno de la novela tiene algo, poco o mucho de usted?
Ninguno, pero ha sucedido que he sido yo mismo el protagonista del cuento “Fue por tu amor, María” y de la novela Que te vaya como mereces. En ambos soy yo mismo, Gonzalo Lema, y tengo a Santiago Blanco mirándome de muy mala manera. Él no me tiene la menor simpatía. Yo, en cambio, pienso que él es, a su modo, un hombre ético. Me cae bien. A la gente que lo conoce le cae muy bien.
¿Podría compartir con nosotros alguna anécdota relacionada con la época en la que escribió esta novela?
Hola, mi amor está ambientada en mis recuerdos de la adolescencia en Villamontes, cuando la visité con mi padre que era vecino, entrerriano. La escribí pensando en el río Pilcomayo, en los weenhayek, matamos, chiriguanos y algunos tobas; en los sábalos y el dorado. Cuando volví a visitar esa ciudad que quiero tanto, la novela ya estaba escrita. Fui a comprobar si mis recuerdos estaban anclados en la realidad.
Háblenos de su siguiente proyecto. ¿A qué género literario pertenece?, ¿con qué nos va a sorprender en esta ocasión?, ¿continuará Santiago Blanco en las próximas historias?
No lo sé, Cindy. Yo leo y escribo sin cesar, como una máquina que gira y expulsa novelas, cuentos, artículos y entrevistas. En todo caso, quisiera que Santiago Blanco acompañe mi vida hasta el final.