Productores del valle revalorizan la elaboración de la chicha
La chicha cochabambina congregó ayer a cientos de pobladores en un coloquio departamental donde alrededor de 32 productores de los 47 municipios del valle bajo, alto y central revalorizaron el producto a través de la venta y la explicación de su preparado artesanal.
Chicha de quinua, chuspillo, trigo, maíz amarillo y kulli fueron algunas de las muestras que cautivaron el paladar de los visitantes. Estos acompañaron la bebida, de 500 años de tradición, con platos típicos. Por su parte, los productores de Quillacollo, Punata, Tarata y Cliza, entre algunos ofertaron el producto en cantaros de barro con precios populares. Entre tanto, la presidenta de la Federación Departamental de Productores y Reventa de Chicha, Luz Rojas, informó que la actividad también buscó condenar el trabajo de los “malos” productores.
“Los productores presentes serán los que empezarán a trabajar contra aquellos que no cumplen las condiciones de higiene y calidad. Lo mismo pasa con las señoras de reventa que controlarán especialmente a esos locales mañaneros, clandestinos”, dijo.
El productor con más de 10 años de experiencia, Marcelo Escobar, indicó que el proceso de producción de la chicha dura hasta tres semanas y se inicia con la selección del grano. Continúa con el remojado del mismo hasta su germinación y su posteriormente es secado para ser molido.
Asegura que la etapa más importante radica en el “malteado” y el “juntuchi” de los productos para el fermentado final en cántaros de barro.