Ya se pagó el 69% del tren, pero hay dudas sobre las pruebas y calidad
Más de la mitad de tren metropolitano —el 69 por ciento— ya está pagada, todavía existen dudas sobre el plazo de entrega, la seguridad y la calidad de toda la obra.
Sólo se tiene un plan para iniciar pruebas en septiembre en la línea roja, de 5,5 km, y en parte de la verde, hasta Colcapirhua, de casi 10 km, para una entrega parcial. La línea amarilla está paralizada, según datos de la UTF.
La obra, adjudicada por 447 millones de dólares en agosto de 2017 a Joca (España) y Molinari (Suiza), unidas en el consorcio Tunari, debía estar lista en tres años, en 2020.
Pero luego de cuatro años, uno marcado por la pandemia, el Gobierno ha pagado 308 millones de dólares, el 69 por ciento, según el reporte de julio que se dio en medio del conflicto entre la empresa, el Ministerio de Obras Públicas y las subcontratadas.
Con el saldo, 139 millones de dólares, se tiene que concluir el 10 por ciento de la línea roja, el 30 por ciento de la verde y el 80 por ciento de la amarilla.
La línea verde irá de Sipe Sipe a la estación central de San Antonio, con 27 km; la roja, de San Antonio a la Facultad de Agronomía, con 5,5 km, y la amarilla, de San Antonio a El Castillo en Sacaba, con 7 km.
Pese a los pagos, la empresa arrastra deudas con los subcontratistas, que aseguran que desde hace seis meses no se les paga y dependen del desembolso que haga el Gobierno, según las planillas aprobadas.
A pesar de los conflictos financieros, el coordinador de la Unidad Técnica de Ferrocarriles (UTF), dependiente del Ministerio de Obras Públicas, Gonzalo Pally, indicó que en septiembre se iniciarán las pruebas en dos líneas.
“Tenemos un avance de la obra del 63 por ciento y uno financiero del 69 por ciento. Si lo dividimos por líneas, tenemos en la roja un 90 por ciento; en la verde, 70 por ciento, y en la amarilla, 20 por ciento”, detalló.
El gerente de Tunari, Domingo García, maneja otros porcentajes. El avance físico es del 76 por ciento y el financiero, del 66 por ciento.
Asimismo, señaló que por esa diferencia el Ministerio de Obras les adeuda 300 millones de bolivianos. Dijo que urge una quinta orden de cambio para reprogramar la fecha de entrega del proyecto. La fecha de finalización era el 26 de diciembre y “todos sabemos que esa fecha es imposible”, expresó.
Estado
En un recorrido por las dos líneas, roja y verde, se evidenció que hay mucho por hacer.
En la verde, por ejemplo, las obras en la subestación de Suticollo no empezaron y los rieles están colocados a los extremos, porque no se acabó de construir la plataforma. Además, las subestaciones de Vinto, Quillacollo y Colcapirhua tampoco están, al igual que 19 paradas.
En la roja faltan obras civiles en el entorno a los apeaderos y la subestación de Agronomía; además, no existe señalética en los cruces. Sin embargo, se hace la semaforización.
Calidad
Sobre la denuncia de falta de control de calidad que hizo el exresponsable de Seguridad Alfredo Linares, especialmente a los trabajados de soldadura, electricidad y obra civil, porque no hay personal con experiencia en la UTF; sino clanes, Pally negó pero no presentó el staff clave del monitoreo.
Pally señaló que todos cumplen con el perfil y la experiencia, sin embargo, no quiso mostrar el currículo y dijo que los documentos están en el Ministerio de Obras Públicas, en La Paz.
93 frentes de trabajo
El gerente de Tunari señaló que existen 93 frentes de trabajos, con 542 obreros, en el proyecto del tren metropolitano.
ADVIERTEN DE AFÁN POLÍTICO EN ENTREGA
El exasambleísta Mario Orellana ve un afán político en la entrega parcial del tren metropolitano para hacer un “show el 14 de septiembre”, por la efeméride.
“Los trabajos en la línea verde faltan mucho. Además, se tenía que haber intervenido el entorno de la estación central para que la accesibilidad sea expedita”, explicó Orellana.
El exasambleísta pide la intervención de la Gobernación y de los alcaldes del eje metropolitano para fiscalizar.
El megaproyecto demanda 447 millones de dólares, pretende conectar la ciudad con Sacaba, Colcapirhua, Quillacollo, Vinto y Sipe Sipe por una línea de 42 km.