Venta de hidrocarburos cae 70% y compra de combustible sube 150%
En los últimos ocho años los ingresos por la exportación de hidrocarburos cayeron en 70 por ciento, mientras que la importación de combustible y lubricantes creció en 150 por ciento. Esta situación afecta negativamente a la economía del país, por lo que los especialistas recomiendan tomar medidas urgentes ante la caída de las reservas hidrocarburíferas.
El exministro de Hidrocarburos Mauricio Medinacelli señaló que esta situación causa mayor déficit fiscal, la caída de las reservas del Banco Central de Bolivia (BCB) y la desaceleración del Producto Interno Bruto (PIB).
La baja en la producción también dificulta cumplir con los contratos de exportación a Brasil y Argentina, por lo que se pagan multas y constantemente se realizan adendas a los contratos para disminuir los volúmenes.
En 2014 la exportación de hidrocarburos generó 6.595 millones de dólares, pero entre enero y noviembre de 2021 la cifra fue de 2.063 millones, según datos del Ministerio de Economía y el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), lo que representa una caída del 70 por ciento.
En tanto, entre enero y noviembre de 2021 la importación de combustible fue de 1.697 millones de dólares, que representa un incremento de más de 150 por ciento en relación con los 669 millones de dólares importados en ese mismo periodo de 2020.
El experto en política energética Francesco Zaratti indicó que la baja de las exportaciones de gas y el incremento de la compra de combustible están estrechamente relacionados. “Disminuir la exportación significa también que baja la producción y tener menos líquidos para combustibles y, por tanto, aumenta la importación de diésel y gasolina. Esa caída refleja el hecho de que no se han hecho exploraciones, no se han repuesto reservas y los campos que nos han dado mucha riqueza en los últimos 20 años están agotándose”, indicó.
El especialista dijo que esto representa malas noticias para la economía nacional y recomienda al Gobierno diversificarse y tratar de reducir el consumo de gas en el mercado interno con fuentes renovables que pueden reemplazar su uso para producir energía, con lo que se podría generar más recursos para la exportación.
A partir de 2015, los ingresos por exportación de hidrocarburos comenzaron a caer (ver infografía) y empezó también el déficit de la balanza comercial. “Eso significa una salida de divisas hacia fuera”, indicó, por su parte, el economista Germán Molina.
Esta situación causa que el Tesoro General de la Nación (TGN) reciba menos recursos. “Esto provoca que el circulante en la economía haya disminuido. En síntesis, el efecto es para todos los ciudadanos en diversos niveles de acuerdo a la actividad económica que realicen”, explicó.
La caída en los ingresos por la exportación de los hidrocarburos afecta principalmente al TGN, pero también a las gobernaciones, municipios y universidades.
El 2021 fue un año con una mayor caída de la producción de hidrocarburos en el país, lo que causó dificultades para cumplir los compromisos de exportación de gas. Para poder atender los cupos de exportación, el Gobierno trató de reducir la quema de gas para producir electricidad, fomentó la electromovilidad y la generación de energía renovable en los domicilios, y anunció un plan agresivo de exploración con modificaciones en la Ley de Hidrocarburos.
En 2013 el país producía 61 millones de metros cúbicos día (MMm3d) de gas, mientras el 2021 produjo 44. Según Medinaceli, el país podría dejar de exportar gas a Argentina en 2033 y a Brasil en 2040, por lo que recomienda al Gobierno hacer reformas urgentes.