Las exportaciones caen en 28% en enero y se registra un déficit de $us 171 MM
Las exportaciones en enero de este año disminuyeron en 28% en relación con el mismo mes de 2023, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
El reporte da cuenta que Bolivia exportó el primer mes de esta gestión 613 millones de dólares. En enero de 2023 se habían exportado 854 millones de dólares.
Pero también hubo una caída de 18 por ciento en relación con las exportaciones del mes anterior (diciembre 2023), en un contexto marcado por la falta de dólares, el alza de tipo de cambio paralelo y el costo de las importaciones para la industria nacional.
Las importaciones también bajaron, pero levemente y sólo en 10%. En enero de 2024 se importaron bienes por 784 millones de dólares y en enero de 2023 la cifra fue de 870 millones.
Los nuevos datos reflejan un déficit comercial de 171 millones de dólares el primer mes de esta gestión, en la que se reporta una caída en las ventas de gas natural en 26 por ciento y en las de oro en 86 por ciento en comparación con el año anterior.
En una nota la agencia ABI señala que este déficit y caída en las exportaciones se deben a factores externos, fenómenos climáticos y los bloqueos impulsados por la facción evista del MAS que apoyaba una nueva candidatura del líder cocalero.
El Gobierno nacional informó, entonces, que el impacto económico por la medida de presión bordeó los 1.000 millones de dólares, además de un impacto en la industria cochabambina y nacional.
Exportación de carne
El Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) resaltó el continuo incremento en la exportación de carne bovina y sus derivados en los últimos años. Entre 2018 y 2023, las exportaciones de este sector se elevaron en más de 1.000 por ciento.
El 2018 se habían exportado productos por 15 millones de dólares, mientras que en 2023 la cifra llegó a 199 millones.
El principal destino de este mercado es China, con 60%; seguido de Hong Kong 33 por ciento, y Ecuador 3,3 por ciento.
Pese a ello, economistas ambientales y activistas señalaron que el crecimiento de este sector viene acompañado de deforestación y destrucción de una parte de la Amazonía boliviana.
