Doctores de la Alegría buscan adeptos
La risa es sinónimo de vida, dice un conocido refrán que cobra relevancia científica tras una serie de estudios que demostraron que al reír los seres humanos fabrican una hormona llamada endorfina, que es la encargada de elevar la producción de glóbulos blancos y subir las defensas del cuerpo para enfrentar mejor las enfermedades.
El coordinador General de la Fundación Doctores de la Alegría, Moisés Callahuara, explicó que desde hace 12 años en Cochabamba diferentes profesionales se capacitan en “risoterapia” para ayudar a los pacientes más pequeños y también a los de la tercera edad a sobrellevar el mal momento por el que están pasando y sobreponerse a los problemas de salud que padecen, a través de un poco de alegría que les ayuda a tomar su medicación o sus alimentos con más tranquilidad.
“Trabajamos con este fin: Reír para ayudar a vivir”, dijo el experto y explicó que este grupo de médicos ficticios “con su mandil blanco y sus narices rojas recorren varias salas del Pediátrico del Hospital Viedma, el Maternológico Germán Urquidi, además del asilo El Buen Pastor para ayudar en la recuperación de los pacientes y reforzar la humanización hospitalaria”.
Por esa razón, desde mañana en el hotel Regina (ubicado en la calle Reza, cerca del Prado) empezarán a capacitar al nuevo grupo de doctores de la alegría, que podrán trabajar ayudando a los pacientes de estos centros de rehabilitación, razón por la cual todos los interesados en formar parte de esta organización pueden presentarse desde las 9:00 hasta las 13:00.
“La capacitación se realiza en 15 encuentros que se efectúan principalmente durante los fines de semana y algunas noches de tres semanas”, dijo Callahuara.