Saboreando el dulce de la corrupción
Miembros del actual Gobierno, que tanto critican a la anterior administración por hechos de corrupción, ahora también están “saboreando el dulce” de este flagelo.
El caso más sonado está relacionado con el exgerente de Entel, Elio Montes, quien es acusado por presuntos actos de corrupción. Montes se fugó del país ante las narices de las autoridades.
Montes fue destituido el pasado fin de semana luego de haberse descubierto que en poco más de 80 días al frente de la estatal de telecomunicaciones canceló el finiquito a 13 personas que trabajaron menos de un mes en Entel por una cifra total de 868.998,42 bolivianos.
Entre las denuncias en su contra, también está el millonario monto que destinó Entel, por concepto de auspicio a un reconocido piloto boliviano que compite en diferentes Rallys.
En este caso, Montes es acusado de aprobar un desembolso de 160.000 dólares por este ítem. También es señalado por haber pagado un millonario contrato para la televisación de partidos de fútbol.
Pero la corrupción no sólo atañe a esta empresa de telecomunicaciones. Existen denuncias de trabajadores de varias empresas estatales como Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y la aerolínea bandera, Boliviana de Aviación (BoA), donde se estarían dando casos de contratos de personal con sobresueldos.
El ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Iván Arias, que antes fungía como un “equilibrado analista y experto político” y criticaba duramente la corrupción del anterior gobierno, ahora tiene que actuar con celeridad y justicia para luchar contra este flagelo y el despilfarro de dinero que se está dando en las empresas estatales que están bajo su control.
El autro es editor de la sección Mundo de Los Tiempos
Columnas de ALFREDO JIMÉNEZ PEREYRA