Expertos ven imparcialidad en la CIDH, pero el Gobierno no aplica las recomendaciones
Analistas manifestaron que actualmente existe imparcialidad en los criterios de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre las denuncias de vulneraciones en Bolivia, aunque de manera lenta. Sin embargo, advirtieron que el Gobierno omite las recomendaciones de este y de otros organismos internacionales independientes.
Los expertos citaron como ejemplo el tema de la persecución política con el pretexto de terrorismo o el referido a la reforma de la justicia, que hasta el momento no presenta ningún avance, pese a las recomendaciones del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI).
El activista en derechos humanos, Franco Albarracín, mencionó que la CIDH fue cuestionada en 2019 a causa de la gestión del entonces secretario ejecutivo, Paulo Abrão, quien demostró su parcialidad hacia el Gobierno del expresidente Evo Morales.
Sin embargo, esta situación fue subsanada con la de la elección del GIEI para la evaluación de los hechos de violencia y vulneración de los derechos humanos ocurridos en 2019 y con la designación de Tania Reneaum Panszi como secretaria ejecutiva de la CIDH.
Para Albarracín, en el informe del GIEI se presentan aspectos relevantes y, además, se realiza el seguimiento a las recomendaciones de manera independiente, “por el momento”.
Si bien no hay pronunciamientos contundentes sobre los últimos acontecimientos en Bolivia, como la detención del gobernador Luis Fernando Camacho, la CIDH asume una postura crítica sobre Bolivia, aunque lentamente, sostuvo Albarracín.
El experto en derechos humanos mencionó como un ejemplo la resolución sobre el caso terrorismo en el que condena los hechos que viabiliza futuros procesos contra las autoridades responsables, entre ellas el exmandatario Evo Morales.
El abogado Eusebio Vera coincidió con Albarracín sobre la CIDH y señaló que sus recomendaciones son imparciales y se basan “en la verdad material de los hechos y en la sana crítica”.
Albarracín anotó también que el Gobierno no hace caso de las sugerencias del organismo internacional. “No se cumplió ninguna de las recomendaciones de la CIDH ni siquiera para las víctimas de Sacaba y Senkata”, sostuvo.
Vera cuestionó que ni siquiera hubo una iniciativa ni intencionalidad de cumplir las recomendaciones por parte del Gobierno central, como los cambios a la estructura de la administración de justicia.
Más de 60 recomendaciones
La CIDH y el Estado Plurinacional de Bolivia decidieron suscribir un plan de trabajo para la Mesa de Seguimiento de Bolivia. El objetivo es que contribuya a la consolidación del diálogo con los diversos sectores de la sociedad en torno al proceso de implementación de las recomendaciones realizadas en el informe del GIEI Bolivia, respecto de los hechos de violencia y vulneración de los derechos humanos ocurridos entre el 1 de septiembre y el 31 de diciembre de 2019. Se emitieron más de 60 recomendaciones.