Encuesta: El 40% de los bolivianos cree necesario un “gobierno de mano dura”
La democracia en Bolivia muestra signos de desgaste profundo y preocupante. Una reciente encuesta nacional realizada por Datacción, efectuado por la politóloga María Teresa Zegada, revela que casi un 40% de los bolivianos cree que el país necesita un “gobierno de mano dura”, mientras que un alarmante 42,1% estaría de acuerdo o muy de acuerdo con cambiar la democracia del país “por la fuerza”.
El descrédito hacia las instituciones estatales y el sistema político no solo evidencian el debilitamiento de la democracia en Bolivia, sino que también ponen en cuestión las formas de acceso al poder y la adhesión a la normativa.
El debilitamiento de las instituciones democráticas, el aumento de la desconfianza ciudadana hacia las autoridades de los distintos órganos del Estado y la recurrente vulneración de las leyes y patrones de convivencia política llevaron al país a una profunda polarización política y social.
La situación se agravó aún más con el flagrante irrespeto al resultado del referéndum de 2016 y la crisis desencadenada por las elecciones fallidas de 2019, sumado a las divisiones internas en el partido de gobierno y problemas de corrupción, ineficiencia y favoritismo político.
Las respuestas de los encuestados evidencian la crisis de la institucionalidad democrática en el país. Si se hila más fino y relaciona las respuestas con otra pregunta que da cuenta de la aceptación de una eventual acción de las autoridades al margen de la ley, así sea para capturar delincuentes (que son el 42,2% de los consultados), se observa que hay una percepción poco propensa a respetar la normativa, lo cual es otro grave síntoma de la crisis de la institucionalidad democrática.
Otro dato llamativo es la preferencia de un candidato presidencial ideal. En la encuesta, se percibe que al 77,9% de los consultados no le importa si el candidato ideal es hombre o mujer. Además, a un 78,9% no le interesa si el candidato tiene un discurso ideológico de izquierda o de derecha. Por último, a la gran masa de encuestados, que alcanza a un 78,7%, no les importa el origen étnico del candidato. No obstante, cuando se cuestiona si el candidato ideal debería tener mano dura o ser concertador, la población se inclina en un 45,8% por la primera opción frente a un 31,4% que prefiere la segunda.
En conclusión, las señales de descontento y desconfianza en la democracia se acumulan en Bolivia, y se evidencia en la propensión de los bolivianos hacia soluciones de mano dura y en la consideración de un posible cambio de la actual democracia “por la fuerza”. Este no es un dato irrelevante, pues da cuenta del desgaste del régimen como tal y no solamente de los gobernantes o autoridades de turno. La democracia boliviana enfrenta un periodo crítico, y su futuro está en juego.
FICHA TÉCNICA
Estudio: Encuesta del Foro Regional con alcance nacional
Cliente: Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social, CERES
Fecha de realización: 27 de junio al 13 de julio de 2023
Modo de la encuesta: Encuesta telefónica CATI (Entrevista telefónica asistida por computador, por sus siglas en inglés) a partir de un equipo descentralizado de encuestadores.
Muestra: 1.113 entrevistas efectivas realizadas por DATACCION SRL. La encuesta incluyó un filtro para aplicarse solamente a personas de 18 años de edad o más. La muestra levantada permite generar inferencias acerca de la población adulta boliviana con un margen de error de +-2,94% y con un nivel de confianza de 95%. Permite, además, generar inferencias válidas para las áreas metropolitanas de Santa Cruz de la Sierra, La Paz-El Alto y Kanata Cochabamba, con márgenes de error que van del +-6,6 al 7,5%.