Tras búsqueda de una adolescente desaparecida, su padre confiesa haberle quitado la vida y enterrar su cuerpo
Un hombre del Trópico de Cochabamba fue condenado a 30 años de cárcel por el delito de feminicidio, que admitió haber cometido contra su propia hija de 17 años de edad.
La víctima ya habría desaparecido en agosto del año pasado y la última persona con la que tuvo contacto era su padre, indicó la fiscal departamental Nuria Gonzales, según reporte de la Red Pío XII de ERBOL..
De acuerdo con la investigación, el padre y su hija se habrían trasladado a su chaco en la región de Entre Ríos, en un sector donde sólo se accede en canoa, antes de la desaparición de la adolescente.
El sujeto alegaba que la joven habría desaparecido con una pareja, pero posteriormente se descubrió unos mensajes de teléfono celular que dieron cuenta de circunstancias extrañas en lo sucedido.
Se abrió la investigación por trata, pero al constatarse los mensajes, el padre reveló el lugar donde se habría enterrado a la joven.
"Se ha hecho la autopsia de ley, se han recibido declaraciones y todas las actividades investigativas. Por lo cual ante la contundencia de las evidencias, el autor ha admitido la comisión del hecho delictivo", indicó la fiscal.
Señaló que el padre de la víctima habría golpeado a la misma y le produjo una asfixia mecánica, para posteriormente enterrar su cuerpo en el mismo chaco.
Según la fiscal, el móvil del crimen consiste en que el padre y la hija tenían una relación incestuosa y se habían generado conflictos, porque el progenitor tenía una nueva pareja.
"Se han dado las condiciones legales en la audiencia y se ha establecido una sentencia condenatoria de 30 años sin derecho a indulto, que debe cumplir en el padre de la víctima. Actualmente ya estaría el caso resuelto", finalizó la autoridad del Ministerio Público.