"Johanne Sacreblu": la sátira de "Emilia Pérez"
“Satirizar Emilia Pérez es absurdamente sencillo”, asegura, en entrevista, Camila Aurora, directora del cortometraje Johanne Sacreblu, su cómica réplica a la película del francés Jacques Audiard.
Después de ver el polémico narcomusical protagonizado por Karla Sofía Gascón, la creadora de contenido trans lo encontró ofensivo, por lo que decidió usar su talento para responder con un filme que caricaturiza dicha trama.
“Al menos en mi posición, como mujer trans mexicana, es sencillo sacar jugo de todas las violencias y ofensa que la película genera. Siento que nuestro enojo es poco. La cinta es un acto de discriminación: no se trata de que las salas deberían estar vacías, es que ni siquiera debería ser legal que se proyecte. El Conapred (Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación) debería estar trabajando ese caso. Nuestra manera de defendernos es a través de la comedia”, dice.
Con un presupuesto de 30 mil pesos, recaudados mediante redes sociales, Aurora puso en marcha el corto, el cual filmó en dos días y con sus amigos. Disponible en YouTube, logró más de 3 millones de vistas y se viralizó tremendamente.
Debido a ese éxito, los directivos de la cadena exhibidora Cinedot decidieron estrenarlo en sus pantallas desde hoy.
“Ya está monetizando, y la mitad de lo que genere va a ir para apoyar a causas y asociaciones que defienden causas que Emilia Pérez pisoteó, como los desaparecidos, la violencia de género, entre otros. Es un producto que evocó mucho nacionalismo”, añade la creativa.
La trama gira en torno a Johanne Sacreblu, una mujer trans heredera de la más grande productora de baguettes, quien intenta destruir el racismo sistemático del país con el arma del amor, pero se enamora de Agtugo Ratatooulli, un hombre trans discriminador y cuya familia es su enemiga comercial.
Aurora prepara una continuación de 30 minutos, con presupuesto de 120 mil pesos también recaudados en la red, con la finalidad de mantener vivo su discurso de protesta hasta el día en que se celebre la ceremonia del Óscar, ya que el filme de Audiard aspira a 13 premios.
“Es una continuación de la historia. Mi principal objetivo es mantener vivo el discurso, al menos hasta el 2 de marzo, porque hasta ese día Emilia Pérez y lo que simboliza van a seguir vivos. Estoy intentando que no se rompa el sentido de esta creación. No son otros 30 minutos con chistes y clichés franceses. Quiero hacer una crítica más directa, cobijada por todo el estilo que ya tiene el primero. El verdadero éxito de esta película no es la fama que está teniendo, es que el gobierno reconociera el acto discriminatorio que simboliza Emilia Pérez”, puntulizó.