55 mil danzarines deslumbran y entrada genera Bs 157 millones
Al menos 55 mil danzarines y 15 mil músicos de 79 fraternidades deslumbraron ayer en la Entrada Folklórica de Urkupiña 2019 con sus coreografías, energía y devoción a la Virgen. La mayoría llegó de rodillas al templo de San Ildefonso, donde está la imagen de la “mamita” rodeada de seis ángeles.
Los fraternos derrocharon alegría, colorido y destreza en la interpretación de distintas danzas y acompañados por 15 mil músicos.
El presidente de la Asociación de Fraternidades Folklóricas Virgen de Urkupiña, René Valdez, destacó el compromiso de los participantes y calculó un movimiento económico de 157 millones de bolivianos. Se estima que el departamento genera 132 millones de bolivianos en una jornada laboral, según datos del PIB.
Valdez explicó que el movimiento económico abarca la confección de trajes, venta de bebidas, comida, transporte, orfebrería, música, hotelería y los salones para la recepción de las fraternidades.
La entrada comenzó a las 9:00 con grupos de salay, morenada y llamerada. Las fraternidades con 40 y 30 años de participación tuvieron prioridad en el ingreso.
A un inicio, el público se molestó porque los danzarines que pasaban por el palco lo hacían con la marcha fúnebre en protesta porque no se declaró feriado.
Sin embargo, luego, ante el pedido del alcalde suplente Willy López y del presidente del Concejo Municipal, René Fernández, a René Valdez, la presentación se normalizó.
El fundador y pasante de la fraternidad Señorial Morenos de Chacaltaya, Julio Mamani, comentó que la disciplina, prestigio social y económico hicieron que la agrupación se gane un puesto privilegiado en el rol de ingreso.
También estuvieron entre las primeras en hacer su paso las fraternidades fundadas en 1980 y 1990. “Estamos bien organizados, todo lo hacemos con fe. Sólo en banda estoy invirtiendo 100 mil bolivianos, a parte del gasto para la recepción en un local para 300 bailarines; estimo que son unos 20 mil dólares”, declaró.
Un integrante de la Llamera Urkupiña, Freddy Melgarejo, manifestó que invierte unos 300 dólares para cumplir con la promesa de bailar para la “mamita de la integración nacional”. Recordó que en los años que participa en una ocasión fueron multados con mil bolivianos por no utilizar la vestimenta adecuada, pero luego de un proceso legal se les rebajó a 500.
En tanto, el representante de Tinkus Cochabamba dijo que se hizo respetar el amparo constitucional y pudieron participar en la entrada, pero la asociación los conminó a pagar en 24 horas una multa de 22 mil bolivianos. “Es lamentable que además de los gastos tengamos que aportar para multas”, reclamó.
Pese al esfuerzo de los bailarines por hacer que la fiesta se desarrolle con normalidad, la ausencia de autoridades nacionales y departamentales fue notaria, debido a la crisis institucional que vive la Alcaldía de Quillacollo por denuncias de malos manejos y el último conflicto por el pedido de declarar feriado. Aunque había mil sillas para invitados, sólo se usó la mitad.
Misa central en Quillacollo, Las actividades continúan hoy con la misa central programada para las 11:00 en el templo de San Ildefonso.
CONTROL POLICIAL EN URKUPIÑA
La Policía desplazó ayer 1.800 uniformados para resguardar la entrada y evitar hechos delictivos en el primer día de la fiesta de la integración.
El subcomandante Juan Carlos Espinoza adelantó que movilizará a otros 3 mil policías este jueves y viernes para la misa, caminata y el Calvario. Ayer hasta el final de la tarde no se registraron incidentes de relevancia. En tanto,Tránsito controla la avenida Blanco Galindo y vías estratégicas.
DOS PALCOS, UN BOMBO GIGANTE, MARCHAS Y CHEF
REDACCIÓN CENTRAL
Sin duda, la fiesta grande de Quillacollo no deja de sorprender. La Entrada Folklórica de Urkupiña contó con dos palcos para mil invitados y que demandaron 100 mil bolivianos.
Si bien los espacios estaban destinados a personalidades, también fueron ocupados por políticos, entre ellos los que impulsaron el debate sobre el feriado.
El intento de politizar la actividad por el letrero “Gobernador enemigo de Quillacollo” fue rechazado.
El bombo gigante con el que bailó el Centro Cultural Sumaj arrancó aplausos del público. “Nuestras danzas revalorizan las costumbres y devoción que tenemos en la Virgen”, realzó el representante, José Espinoza. El paso de las primeras fraternidades se vio empañado por la marcha fúnebre que dispuso la Asociación de Fraternidades Folklóricas en protesta por el rechazo del feriado por impedimentos legales que presentó el gobernador Iván Canelas.
El público abucheó a los danzarines que pasaban caminando por el palco. Finalmente, el alcalde suplente Willy López logró que se suspenda la marcha.
El presidente de la asociación, René Valdez, pidió levantar la protesta “por el bien de Quillacollo”.
La entrada fue aprovechada por voluntarios y el concejal Sergio Rodríguez, de Cercado, para vender choripanes para recaudar fondos para el refugio de canes Gamaliel. El legislador se vistió de chef y atendió un puesto en la calle.