Una agradable Terapia con obra de María Peredo
Teatrografía, de Cochabamba, ha presentado una obra muy graciosa que se llama Terapia, y que la dirige María Peredo. Y en la que actúa Edwin (Moto) Morales, y de quien puedo decir que es un gran actor.
El texto de Terapia, de Martín Giner, es una comedia de fino humor y muy intensa. Hay un juego literario bien logrado en el que se traspasa al personaje, transformándolo de paciente a doctor o de cuerdo a loco, con una delicadeza semántica que en ciertos momentos es casi poético.
Terapia la interpretan dos actores, uno de ellos, un verdadero artista escénico. Ni más ni menos. El otro, un tanto inmaduro e inexperto. No es que lo haga mal, no lo hace, pero es notoria su falta de "carácter" o de "espíritu" en la interpretación de su personaje, un edípico hijo loco que en realidad es paciente y a lo mejor doctor. O sea, un papel difícil, sin duda alguna. Y Gabriel Caballero se esfuerza en entrar y salir de su polifacético personaje porque así lo exige la obra y no lo logra, no totalmente, aunque reconozco un trabajo actoral con una personalidad escénica en formación.
El sonido les salió mal. El uso de tecnología en la puesta en escena exige que en este caso el sonido esté bien grabado, que no parezca grabación, que se confunda con el sonido de la obra, de lo contrario lo que se escucha es una abrupta intromisión de voces que rompen la atmósfera como un cristal arrojado al piso. Pero la idea es buena, aunque de buenas intenciones está hecho el infierno.
La construcción estética y visual, especialmente de las luces y sombras es interesante, pese a los errores técnicos que entre rato y rato irrumpían la obra.
El uso de los objetos no es brillante pero está bien logrado y es extremadamente sencillo, consiste en una silla roja y una cama-diván, el resto se hace por sí sólo. Hay momentos en los que se apagan todas las luces y se aprovecha para cambiar de lado la silla o la cama o los dos. Y lo hacen con dos personas (el equipo de apoyo, me imagino) que no eran lo suficientemente ágiles para que se logre un efecto escénico. Era un corte.
Y en realidad, la obra pasó de corte en corte, ya sea por la inexperta tensión actoral de Caballero, por la falta de pulcritud en la sonorización (Gualberto Sánchez de Lozada) o por las fallas en la sincronización de los efectos de sonido o la caprichosa iluminación. Por angas o por mangas, había ruidos y baches que no dejaron fluir como se debe a una obra tan bonita. Y pese a todo, es una buena obra.
LAS OBRAS DE HOY
El Festival Nacional de Teatro "Bertolt Brecht" ingresa en la recta final con dos obras que estarán en escena esta noche en el mARTadero. La primera, en concurso, está a cargo del elenco Bogatir, a cargo de grupo teatral que viene de la ciudad de La Paz. Esto ocurrirá a las 19:00.
Y las 20:30, Makhurka Teatrode Cochabamba presentará su obra "Obras en Escabeche". Esta segunda obra es invitada al festival.