Tras reclamos de choferes por daños a vehículos, ANH defiende la calidad del combustible
Después de que el ejecutivo del Transporte Libre de La Paz, Limbert Tancara, denunció la venta de gasolinda de baja calidad en el país, ayer, el jefe de la Unidad de Análisis y Evaluación Técnica de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Nelson Lamas, informó que la entidad no recibió ninguna queja formal sobre una presunta “mala calidad” de combustibles.
De acuerdo con el dirigente del transporte, la mala calidad de la gasolina provoca graves daños mecánicos a decenas de vehículos del sector del autotransporte. Sin embargo, el responsable de la ANH señaló: “No se ha realizado una queja formal ante la ANH”.
Lamas explicó que la ANH instruyó a los operadores, tanto de plantas de almacenaje como de estaciones de servicio, que cuenten con oficinas de Defensa del Consumidor para que las personas puedan presentar las quejas correspondientes.
Aseguró que las 160 estaciones de servicio que hay en el territorio nacional son controladas y supervisadas continuamente con laboratorios móviles para garantizar la calidad.
“En cumplimiento de la normativa vigente, la ANH realiza los muestreos de calidad y las pruebas de calidad a través de los laboratorios móviles tanto en plantas de almacenaje como en estaciones de servicio”, puntualizó Lamas.
Finalmente, resaltó que en todas las etapas que atraviesa el combustible destinado al mercado interno –desde la importación, producción, almacenaje, despacho y comercialización– se cuenta con trazabilidad y certificados de calidad correspondientes, “para tranquilidad de la población”.
Más datos
“Imagínense, la gasolina ya no es como antes: es más aceitosa, tiene una densidad más tenue y eso está haciendo daño a nuestras movilidades”, declaró Tancara a los medios de comunicación.
Según el dirigente de los transportistas, en la última semana se reportaron fallas mecánicas en al menos cuatro unidades del transporte, cifra que en cuestión de días ha superado las 20.
Las averías más frecuentes afectarían a bombas de gasolina, filtros e inyectores, elementos esenciales del sistema de combustión. “¿Quién va a pagar el daño y perjuicio que sufre todo el autotransporte?”, cuestionó, exigiendo respuestas inmediatas de las autoridades competentes.
Ante esta situación, la ANH reiteró que no se tiene una denuncia formal sobre lo ocurrido y solicitó a los afectados respaldarse.