Muere Alfie Evans, un bebé en el centro de una batalla legal
Londres y Roma
El bebé británico Alfie Evans, que se encontraba en estado terminal, murió la madrugada de ayer tras una larga batalla judicial de sus padres por lograr, en vano, prolongar el tratamiento contra la opinión de los médicos, un caso que conmueve al Reino Unido y movilizó hasta al Vaticano.
La justicia británica había rechazado el miércoles un último recurso de Kate y Thomas (padres del bebé) que, con el apoyo del papa Francisco y del Gobierno italiano, reclamaban continuar el tratamiento de su hijo en Italia, donde los hospitales habían propuesto acogerlo.
Esta decisión puso fin a una larga batalla judicial entre los padres del menor y el equipo médico del hospital infantil Alder Hey de Liverpool, donde Alfie estaba ingresado desde diciembre de 2016. Según el establecimiento médico, el bebé, nacido el 9 de mayo de 2016, sufría una patología neurodegenerativa rara.
PAPA FRANCISCO
Profundamente afectado
El papa Francisco se dijo “profundamente afectado” por la muerte del pequeño. “Estoy profundamente afectado por la muerte del pequeño Alfie. Hoy rezo especialmente por sus padres, mientras Dios lo acoge tiernamente en sus brazos”, escribió el Papa en Twitter.