Un boliviano es condenado a morir por traficar droga
El pasado 4 de enero, Víctor Parada Vargas, el joven padre boliviano, fue condenado por la justicia de Malasia a morir en la horca por el delito de narcotráfico.
Parada, oriundo de la comunidad de Minero, en el norte de Santa Cruz, fue sorprendido con 450 gramos de cocaína el año 2013 cuando viajó al país asiático en calidad de “mula” (transportador de droga).
El boliviano vivió siete años en Benilloba, Alicante (España), estudió carpintería y realizaba trabajos en un pueblo de la Comunidad Valenciana hasta que fue deportado en 2009 porque no tenía sus papeles en orden.
Tras la deportación, trabajó en el oficio que aprendió y tuvo un hijo, pero sufrió un accidente laboral en el que perdió dos dedos de la mano y fue despedido.
Según el diario español El Mundo, después de vivir una mala situación económica y no tener trabajo, la familia cuenta que apareció con un empresario sudafricano que se ofreció a prestarle dinero, pero bajo condiciones.
“Él estaba desesperado. No tenía trabajo y necesitaba sacar a su hijo adelante, así que aceptó la oferta”, expresó su hermana.
No obstante, la ayuda ocultaba una extorsión. El “empresario” le remarcó que si no le devolvía el dinero en un determinado tiempo debía viajar como mula a Malasia. No tuvo más opción que acceder. Viajó y fue detenido en Kuala Lumpur, capital de Malasia.
La familia dice que la condena es demasiado dura.
La lucha de la madre de Víctor también está en Bolivia, donde está el hijo pequeño del sentenciado. Desde aquí está tramitando los papeles para que el menor vaya a vivir España.
La familia no quiere dinero, sino ayuda, aunque tienen deudas por 40.000 euros que han sido destinados para recurrir a diferentes organismos. También han pedido ayuda en instituciones como la embajada boliviana en Valencia o la embajada de Malasia en Madrid.
La atención recibida es poca y el calvario continúa, mientras que Víctor lleva encerrado aguardando un perdón.
DATOS
Ejecutados por narcotráfico. En 2014, dos brasileños fueron ejecutados en Indonesia y dos mexicanos en EEUU por el delito de narcotráfico.
Incremento de ejecuciones en el mundo. Según Amnistía Internacional, al menos 1.634 personas fueron ejecutadas desde 1989 a 2015.
33 países aplican la pena de muerte. En América Latina están Cuba y Estados Unidos; en África, cinco países, y en Asia, 26 países aplican esta pena.
MEDIOS INTERNACIONALES DESTACAN LA NOTICIA
Varios medios europeos hacen repercusiones del boliviano sentenciado a morir en la horca, sobre todo medios de España, donde vivió anteriormente.
Víctor Parada es noticia en medios como La Vanguardia de España, Levante, el mercantil valenciano, El Mundo de España, EFE, entre otros.
El último medio mencionado, por ejemplo, cuenta que su madre sigue teniendo domicilio en Benilloba, mientras que sus tres hermanas viven en la cercana ciudad alicantina de Alcoy, donde todos trabajan teniendo la doble nacionalidad, y desde donde tratan de conseguir que la Justicia malaya no aplique la pena capital a Víctor.
Las hermanas del sentenciado piden la ayuda de alguna ONG o abogado experto en este tipo de situaciones para conmutar la pena, liberarlo y que retorne a Bolivia.