Gobierno denuncia tráfico de armas y complot, pero sin pruebas
Mientras el Gobierno usa el supuesto envío de armas de Argentina y una presunta confabulación internacional para sustentar y dar fuerza a su versión de “golpe de Estado” sin hasta el momento presentar pruebas, deja de lado los pedidos de ampliación de declaración del excomandante de la Armada, Gonzalo Jarjuri sobre los sucesos anteriores y posteriores a la renuncia del expresidente Evo Morales en 2019. Y el Ministerio Público, pese varias solicitudes, aún no llama a declarar a Morales ni al vicepresidente Álvaro García Linera.
La última declaración, sin prueba, la hizo ayer el presidente Luis Arce al asegurar que el “golpe de Estado” de 2019 contó con un “decidido apoyo” de varios Gobiernos y de varias ONG norteamericanas que se disfrazaron de plataformas ciudadanas.
“La verdad sale a la luz. Hoy los golpistas ya no tienen argumentos para defenderse que el golpe de Estado contó con un decidido apoyo internacional y de suministro de armamento y munición para la represión como es el caso de los anteriores Gobiernos de Ecuador y la Argentina”, afirmó.
A esto se suman anteriores declaraciones públicas del presidente de la cámara de Diputados, Freddy Mamani, quien adelantó que “sospechan” de la participación de los Gobiernos de Brasil y Chile, razón por la recomendarán una investigación.
Arce también dijo que existen indicios de que el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, coadyuvó al golpe de Estado en Bolivia en 2019.
¿Y las armas?
Sobre el supuesto material químico para reprimir y dispersar protesta que el comandante general de la Policía boliviana, Johnny Aguilera, aseguró que se encuentra en depósitos policiales. No obstante, dicha autoridad aún no mostró prueba alguna de su existencia.
Aguilera mencionó que se trata de más de 29 mil elementos que podrían formar parte del envío irregular de material represivo por parte del gobierno de Mauricio Macri a Bolivia durante noviembre de 2019.
Sin embargo, el jefe policial también admitió que no existe documento alguno que registre la existencia de este material.
Las declaraciones de Aguilera fueron ratificadas ayer por el viceministro de Régimen Interior y Policía, Nelson Cox, quien admitió de que no existe documentación formal sobre le entrega de municiones argentinas a la Policía Nacional, aunque en sus depósitos fueron hallados pertrechos que habrían sido enviados por el Gobierno de Mauricio Macri .
“No existe documentación de respaldo, han desaparecido algunas notas formales de envío”, dijo Cox entrevistado en el programa Asuntos centrales.
El Gobierno acusó a Mauricio Macri de enviar a Bolivia 40 mil cartuchos AT 12/70, 18 gases lacrimógeno en spray MK-9, 5 gases lacrimógeno en spray MK-4, 50 granadas de gas CN, 19 granadas de gas CS y 52 granadas de gas HC para respaldar el “golpe de Estado” contra Evo Morales.
Si bien el comandante Aguilera no dio fecha para mostrar los pertrechos hallados en los depósitos de la institución, ayer el embajador argentino en Bolivia, Ariel Basteiro, dijo que en las próximas horas concurrirá al galpón donde se encuentra el citado material represivo para “hacer una inspección visual”.
“Íbamos a ir esta mañana, nos solicitaron pasar la visita a ese galpón”, expresó el Embajador, en declaraciones a Radio Nacional, y manifestó que ahora “todavía” no tienen “horario”.
El embajador Basteiro también indicó, al igual que Aguilera y Cox, que “no existe documentación alguna que respalde la existencia de esos pertrechos”.
Condecoran a Exembajador
El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, condecoró ayer en la Casa de Gobierno local al exembajador de Argentina en Bolivia y actual miembro de su Gabinete provincial, Normando Álvarez García, denunciado penalmente por el Gobierno nacional por su participación en el envío de material represivo al país en noviembre de 2019 por parte de la administración de Mauricio Macri. “Álvarez actuó con una fuerte decisión personal al dar asilo a funcionarios locales y a periodistas argentinos amenazados”, dijo Morales.
Logran distraer y ya no se habla de los militares
Luego de la aparición de la presunta carta de agradecimiento del excomandante de la Fuerza Aérea Boliviana Gonzalo Terceros al ahora exembajador de Argentina en Bolivia Normando Álvarez, el Gobierno y sus operadores se han concentrado en responsabilizar a la Argentina de Mauricio Macri de enviar armas al país y participar del “golpe de Estado”.
El Gobierno ha logrado desviar la atención al tema argentino y se ha dejado el debate sobre las declaraciones de los excomandantes de las FFAA que han revelado detalles importantes de lo ocurrido durante los momentos.
El excomandante de la Armada Gonzalo Jarjuri, quien inicialmente se acogió a su derecho al silencio, luego, a través de sus abogados, solicitó varias veces al Ministerio Público ampliar sus declaraciones, pero hasta el momento no se ha tomado en cuenta su pedido.
A ello se suma la desaparición del excomandante de la Fuerzas Armadas Williams Kaliman, quien burló su arresto domiciliario, y hasta el momento ni la Fiscalía ni la Policía han dado una explicación clara sobre su fuga.
La Fiscalía tampoco ha dado una fecha sobre la convocatoria para que declaren en esa instancia el expresidente Evo Morales y el exvicepresidente Álvaro García Linera.
El analista político Marcelo Arequipa, en una anterior intervención, aseguró que “los comandantes de las FFAA son los que concentran ahora la atención y el MAS sale en pleno a defender su propia su posición”. “El MAS ya no tiene muchas más cartas que mostrar, y falta saber ahora la declaración del comandante de la Armada (Gonzalo Jarjuri)”, señaló.