Mario Filio, el actor de doblaje detrás de los personajes de Disney
Cada 12 de junio se celebra el Día Mundial del Doblaje, para festejar todo el trabajo arduo que realizan los actores e intérpretes de esta labor, todos aquellos que se encuentran detrás de un micrófono dándoles personalidad y una voz a los personajes.
Uno de los actores de doblaje más influyente en Latinoamérica es el mexicano Mario Filio, quien le ha dado voz a muchos personajes de los estudios Disney como: Goofy, Ralph, Obi-Wan Kenobi (Star Wars), Remo y el espejo de Shrek, Rey Julien de Madagascar, Jaimico y Don Gato y su pandilla, entre otros más.
En sus más de 30 años de experiencia en el doblaje ha tenido la fortuna de prestar su voz a más de 50 personajes. También ha doblado a actores como John C. Reilly; Ewan McGregor, Will Smith y Clive Owen.
El también cantante y comediante habló de sus inicios en el doblaje, en una entrevista realizada por el medio digital Duplos, el 9 de junio. Sobre todo cuando su padre, Tilín “El Fotógrafo de la Voz”, rompió su ilusión al contarle que había participado en el doblaje de Los Picapiedra.
Revelación que en ese momento sorprendió al pequeño Mario, y que despertó su incontenible interés por las voces que estaban detrás de los personajes animados. Al punto de convertirse años más tarde en su “gran pasión”, y recientemente en Mejor Actor de Doblaje Animado Premios Lavat 2020.
¿Cómo fueron los inicios de Mario en el doblaje?
“Crecí en una familia de sangre artística, inicié de pequeño en el teatro guiñol acompañando a mi padre “Tilín el fotógrafo de la voz”, quien fue comediante de los 70 y 80. Ahí hacia voces para muñecos imitando a Cantinflas, Topo Gigio, Chabelo, con el tiempo me invitaron hacer doblaje de voces y me di cuenta que podía crearlas. Estudié la carrera de comunicación, donde mis compañeros de publicidad me empezaron a invitar a cursos, audiciones y castings, así empecé en la radio”, contó Filio a Duplos.
El ganador de Voice Arts Awards (los Óscar de la voz) como Mejor Locutor Internacional, revivió sus primeros pasos cantando en Plaza Sésamo o como Jafar en Aladdin. Convirtiéndose posteriormente en la voz de Filoctetes (Hércules) o participando en cartoons como: el Inspector Gadget y Jaimico (Soy la Comadreja).
Transportando a todos los que estaban conectados a su memorable época como actor de doblaje para Cartoon Network con Johnny Bravo y El laboratorio de Dexter. Además de su trabajo en Disney para personajes como Chi-Fu de Mulán y un tiburón en “Los peces son amigos” de Buscando a Nemo.
¿Qué ha sido lo más desafiante para Mario?
“Me he concentrado en ser de pronto camaleónico, un reto es la constante motivación, el ser versátil y poco predecible. Esto me mantiene fresco y con los pies en la tierra para no confiarme. Desde el 2005 me integre al mundo del podcast, ya que es un medio de comunicación muy interesante, además me gusta cantar tengo algunos sencillos”.
Para Mario, ha sido gratificante viajar a varios países y ver que la gente asocia y reconoce su voz por un anuncio de radio, por alguna película de cine o una serie de dibujos animados.
“Ver que a todas las edades la gente se sorprende es un regalo que no esperas. Por lo general en el doblaje trabajas en una sala muy recóndita donde nadie te ve y pasas muchas horas grabando, por eso es muy bonito cuando la gente te felicita y te agradece por ser parte de su niñez”, señala.
Destaca que una de las labores más importantes que tiene desde hace 20 años es compartir sus conocimientos dando conferencias o clases magistrales en las universidades. “Para algunos colegas imparto talleres de capacitación y actualización para aprender nuevas técnicas interpretativas y cuidados de la voz y también los talleres ‘online’ para el público donde doy ejercicios prácticos que te ayudan a llevarlos a la práctica”.
Actualmente continúa realizando doblajes, series y películas para compañías que trabajan por streaming y también brinda clases a grupos de conferencistas de todo el mundo que desean aprender el manejo de la voz sin ser actores ni locutores.
El doblaje
El doblaje de voz es un proceso que consiste en la grabación y sustitución de voces de personajes reales o de animación en un medio audiovisual (cinematográfico, televisivo y radiofónico) mediante recursos digitales. La finalidad del doblaje es dar personalidad y voz a caracterizaciones de personajes en otros idiomas.
Su origen del doblaje se remonta en Europa a finales de siglo XX cuando se utilizaba como recurso para ejercer el control de la información en un contexto político nacionalista. En España, el régimen franquista censuró el mundo audiovisual, modificando y cambiando escenas. Películas como ‘Casablanca’, ‘Mogambo’ o ‘La dama de Shanghái’ son algunos ejemplos de los cambios en el doblaje por ir en contra de la ideología política.