Enfrentamientos entre transportistas y manifestantes en la zona sur deja varios heridos
Un grupo de transportistas y sectores afines al Movimiento Al Socialismo (MAS) que pide liberar las rutas se enfrentaron a pedradas con manifestantes que apoyan el paro en las avenidas 6 de Agosto y Panamericana, con un saldo de al menos tres heridos.
En primer incidente comenzó a las 9:00 cuando los transportistas llegaron a la zona por la avenida Independencia munidos con piedras y palos. Los protestantes que rechazan el resultados de las elecciones generales respondieron a la agresión. A pesar de que la Policía lleg{o a la zona, la trifunca continuó varios minutos antes de que los efectivos dipsersen a ambos bandos.
De momento se conoce que dos personas resultaron heridas: un joven en medio de los enfrentamientos y una mujer de la tercera edad, según el relato de vecinos. La tercera víctima es un policía que recibió el impacto de una piedra en su cabeza.
Varios transeúntes también se vieron afectados por los gases.
Dos horas después cerca de 200 estudiantes de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) llegaron a reforzar la protesta, el enfrentamiento se agrabó. Los transportistas lanzaban piedras desde el puente Independencia mientras que los estudiantes intentaban defenderse con armas caseras, cuetillos y palos.
La Policía dispersó a los grupos con gases lacrimógenos. La avenida 6 de Agosto y las calles aledañas, que presentan puntos de bloqueo, quedaron intransitables tras el enfrentamiento.
En un nuevo amague de pelea los afines al MAS quemaron una motocicleta parqueada en la zona, tras la llegada de más estudiantes.
Adulto mayor queda en medio del enfrentamiento
En el lugar, Felix Rafael, de 90 años, que tiene su puesto de zapatería en una esquina de la avenida 6 de Agosto quedó entre los enfrentamientos.
A pesar de que quedó en medio de ambos bandos, se negó a moverse del lugar y soportó los gases y las piedras que caían a su puesto. Los universitarios lo protegieron con calaminas.
Después de la pelea y aún con el gas en el aire Félix seguía trabajando. "Yo me voy a las tres, a esa hora acabo mi trabajo", repetía. El zapatero de 90 años lamentó los conflictos entre bolivianos y llamó a la paz.
"Nosotros lo estamos cuidando desde la anterior semana que nos encargamos de él, él no quiere moverse por eso lo protegimos y le pedimos a la Policía que nos ayude pero no nos hizo caso, yo creo que la Policía está para servir a su pueblo", lamentó un estudiante.
Minutos después, algunos policías intentaron trasladarlo de lugar pero el se negó nuevamente.