Tradición y novedades marcan las ofertas navideñas en la feria
Diciembre es el mes que más reúne a la familia, que evoca la paz y la unidad. Muchos comienzan los preparativos buscando contar con un espacio navideño en casa que fusione lo tradicional y lo moderno.
Entre las opciones más tradicionales para armar el pesebre que aún se pueden encontrar en la Feria Navideña, en la avenida 6 de Agosto, están los pinos naturales. Provienen de plantaciones de Tiquipaya, los extraen a los dos y cuatro años de crecimiento y se venden entre 50 y 200 bolivianos. El preferido es el pino limón por su fragancia.
“Estoy 50 años, siempre he vendido pinos y pesebres, aunque ya no se venden muchos, hace años cuando vendía en la terminal me faltaron pinos”, recordó una vendedora, Esperanza.
Otra alternativa son los pinos de pirámide dorados. Son la novedad entre los artificiales y hay en tres tamaños: pequeño (1,50), mediano (1,80) y grande (2,10). Son plegables, con luz interior y cuestan 120, 150 y 200 bolivianos. “Son los que llevan más para las oficinas y departamentos. Son cómodos para guardar”, dijo una vendedora, Mónica.
Muchos realzan su decorado con luces. Entre lo clásico están los foquitos intermitentes de 200 o más unidades. Entre lo nuevo se hallan las luces LED en cascada, que ahora vienen en figuras como copos de nieve y estrellas.
Por estos días, en la clínica de niños, el trabajo es intenso para los artesanos como Wilder García.
En la feria se instalaron pequeños talleres, en la 6 de Agosto y Cabildo, para arreglar las manos y dedos rotos de las imágenes del Niño Jesús. También el cabello y hasta piezas de los Reyes Magos que llegan hasta partidas.
Las personas tienen tanto apego y cariño por el Niño, ya que perteneció a un antepasado o fue un obsequio, que hacen todo para conservarlo.
“Nos traen niños mayormente con los dedos y la cabeza rotos. Todo se restaura, incluso, se rearman partes o se forma otro niño”, contó.
Las opciones para renovar la vestimenta del Niño Jesús para Nochebuena, el 24 de diciembre, son diversas porque cada año se ofertan novedades, contó la representante de la Feria Navideña, Elena Caero.
Los trajes nuevos se inspiraron en el Mundial de Catar y constan de una túnica y un turbante. También, está el de Papá Noel que viene en cuatro colores: rojo, blanco, rojo y blanco, blanco y verde.
“Hacemos un esfuerzo para ofrecer todo nuevo en Navidad, porque es una tradición y las familias celebran, tengan o no recursos. Acá se encuentra de todo precio”, dijo.
En cuanto a los juguetes, se ofertan artículos clásicos, como autitos y muñecos, hasta juegos en red y dinosaurios con varias funciones. No faltan las bicicletas.
Los dinosaurios y las muñecas siempre están entre los juguetes más buscados. Entre las novedades está el espinosaurio que echa humo y los dinosaurios bebés. Para las niñas, están las barbies con pijama de unicornio, cuya ropa es hecha por confeccionistas de la feria.
Un vendedor de dinosaurios, Joel, contó que juntan los juguetes durante todo el año para tener una variedad.
Este año varios de los puestos implementaron para la seguridad de los visitantes el pago con QR. Este sistema tiene una buena acogida.
Los típicos gorros y guinchas de Navidad están casi agotados. Este año, aún con la pandemia, se ofrece el gorro del Grinch con barbijo y otros personajes clásicos, como el reno Rodolfo y los muñecos de nieve.