Aceras, árboles y comerciantes
Más arboles y un nuevo revestimiento de las aceras están cambiando el paisaje del centro de la ciudad de Cochabamba. Son dos planes de mejoramiento urbano que se ejecutan de manera de simultánea, tienen distintas magnitudes en términos de área y persiguen el mismo propósito: mejorar la calidad de vida de los citadinos.
Lo están logrando: hasta hace un año, habían sido sembrados 600 plantines de árboles en las aceras de las principales vías del centro de la ciudad y de otras zonas.
Ese logro resulta de la aplicación, desde 2017, del Plan Maestro de Forestación del municipio de Cercado que apunta a plantar un millón y medio de árboles hasta 2027.
Y, en el centro de la ciudad, los trabajos de mejoramiento de las aceras, iniciados en septiembre de 2021, avanzan con resultados notorios para el paisaje urbano y la seguridad de los peatones: el viejo revestimiento de las veredas está siendo reemplazado por baldosas cuya trama evita los resbalones e, incluso, sirven de guía para los peatones invidentes.
Mejorar las aceras implica también eliminar las irregularidades que existían en su superficie, en muchos casos debido al crecimiento de las raíces de añejos árboles que están siendo talados para luego ser reemplazados. Como ocurre desde hace unos días en parte de la avenida San Martín, una de las más comerciales del centro de la ciudad.
Así, estamos en buen camino de tener aceras sombradas y totalmente planas. Pero no es seguro que sean del todo cómodas para el tránsito de peatones. Eso, por los comerciantes que las invaden, cada vez más, instalando sus puestos de venta de todo tipo de mercancías, desde frutas hasta calcetines, pasando por peluches o accesorios para celulares.
Los trabajos de embaldosado de las veredas han desalojado a estos comerciantes. Eso ocurrió hace poco más de un año en el entorno del edificio de Correos y el conflicto surgido por su empecinamiento de volver a ocupar los espacios destinados al tráfico peatonal duró dos meses, hasta que la Alcaldía lo superó con el compromiso de construir una galería comercial subterránea.
¿Cómo superará la Alcaldía el conflicto previsible con los comerciantes que pretenderán reinstalarse en las aceras de la avenida San Martín? Es una pregunta cuya respuesta deben estar afinando los funcionarios municipales.
“Existen normas urbanas para el uso de las aceras, pero no la capacidad efectiva para hacerlas cumplir, ni la voluntad ciudadana de quienes infringen las leyes para modificar su conducta, por intereses individuales que afectan a la colectividad”, decía hace 10 años una urbanista citada en un reportaje de Los Tiempos.
El problema se ha empeorado desde entonces y es un desafío mayor para el Gobierno Autónomo Municipal de Cochabamba.