Protestas que cuestionan la gestión pública se imponen en 2024, según estudio
Entre enero y julio de 2024, se produjeron 702 conflictos en Bolivia, cifra que está dentro el promedio de los últimos tres años. Los problemas, en un 92 por ciento, sucedieron en los ámbitos de la gestión pública, económica, política y ambiental.
Según la Fundación Unir, responsable del estudio “Documento de la Conflictividad Social en Bolivia Enero-Julio 2024”, estas cuatro problemáticas forman parte de la agenda pública y son el centro de preocupación de los bolivianos.
Gestión pública
Entre enero y julio de 2024, se produjeron 281 conflictos vinculados a la gestión pública en los tres niveles del Estado (40% del total de los conflictos del período).
Los pobladores urbanos y rurales fueron los más activos, con 26% de los casos. Una de cada cuatro protestas fue encabezada por los vecinos. Las demandas se refirieron al acceso a servicios básicos, como agua, alcantarillado, mantenimiento de vías, áreas de esparcimiento y otros.
Los conflictos vinculados a la gestión pública tuvieron como escenario principal a los departamentos de La Paz (17%), Santa Cruz (16%), Chuquisaca (14%) y Potosí (14%). Cochabamba reportó solamente el 13% de los conflictos.
Cabe destacar que sólo 8% de las protestas derivaron en enfrentamientos, porcentaje inferior al promedio general de 12%.
Económico
Durante el primer cuatrimestre del año, esta conflictividad presentó, en la mayor parte de los casos (55%), demandas sectoriales específicas y localizadas de trabajadores del sector público.
Las áreas más conflictivas son las de salud y educación, centradas en cuestiones laborales, como incremento salarial, estabilidad laboral, mejora en las condiciones de trabajo y pago de bonos atrasados. Entre las medidas de presión que asumen estos sectores están los paros de actividades, marchas en centros urbanos y, ocasionalmente, huelgas de hambre.
Política
La conflictividad por temas políticos es muy significativa en cuanto a sus efectos negativos sobre la gestión del Estado y el estado de ánimo de la población, aunque en términos cuantitativos haya sido baja (7% del total).
Los conflictos políticos se concentraron en torno a las pugnas del MAS por el liderazgo partidario y la candidatura presidencial, que dio lugar a más de la mitad (52%) de los casos. Entre los más relevantes se encuentra la protesta de una variedad de organizaciones afines a Evo Morales, como el Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade).
Otros conflictos frecuentes fueron los vinculados a la realización de congresos de las dos alas enfrentadas del MAS, así como movilizaciones demandando el cese de la persecución política.
Medioambiente
Los problemas ambientales y los conflictos sociales vinculados se incrementaron de manera dramática en 2024.
Algunas actividades generan altos impactos negativos, como las mineras y las de cambio de uso del suelo, y otras estacionales, como los chaqueos que generan grandes incendios forestales.
Ambos tipos de actividad se expanden sin control y sus efectos son cada vez más graves, sin que merezcan atención por parte de las entidades responsables.