La selección de Portugal alcanzó el objetivo marcado por Fernando Santos y sus pupilos, pasar a octavos de final como primeros de grupo para disponer de un día más de descanso, pero lo hizo con una triste derrota ante la Corea del Sur, que nunca se rindió y acabó encontrando el premio en la prolongación con un tanto de Hwang Hee-Chan tras una galopada de su líder Son Heung-Min.