Tecnología de punta revela existencia de estructuras ocultas
La Paz | Los Tiempos
El estudio y prospección de las ruinas de Tiahuanaco realizado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) con el objetivo de gestar un “sistema de preservación y conservación” del sitio arqueológico requirió el uso de tecnología de punta con el apoyo de un dron y de tres satélites que permitieron definir la extensión de la gran ciudad, detalló el consultor y arqueólogo que trabaja en esa institución, José Ignacio Gallego Revilla.
De acuerdo con los informes, la prospección en Tiahuanaco se desarrolló con una pequeña nave, descrito por el estudioso como un avioncito de 1,20 metros que tomó fotografías verticales del terreno, imágenes solapadas o sobrepuestas unas sobre otras, compartidas en un 30 por ciento, que permitieron la generación de registros tridimensionales.
“Es la visión estereotípica, esa visión de dimensiones pero la mayor parte lo hace el ordenador que analiza la distancia desde el aire a la que se toma la fotografía y comparte los puntos, se crea triángulos a determinada distancia con respecto al suelo, va midiendo. Lo que hace es levantar una malla de puntos en tres dimensiones, rehace una idea en toda el área que ha trabajado el dron. Estaríamos hablando de unas 411 hectáreas, el sistema ha tomado más de 170 millones de puntos en tres dimensiones”, afirmó Gallego Revilla.
Expresó que este trabajo permitió que se genere un modelo en tres dimensiones (tridimensional) y que tiene una precisión de 3,78 centímetros por piso, es decir, cada punto de la pantalla representa el tamaño de una pelota de golf, que es lo que se recopila en la fotografía y representa a un área geográfica del sector, entonces, esa precisión permitió saber qué hay debajo de la tierra.
“En realidad no podemos decir si son viviendas, (si) son templos, lo que sí tenemos es Puma Punku, una estructura muy llamativa porque hasta ahora conocíamos, lo que se podía decir, la pirámide y algunos autores apuntaban a que tenía una especie de plaza, ahora, por ejemplo, a través de la imagen del dron Puma Punku tiene los lados dos plataformas y una plaza. Estaríamos hablando de que Puma Punku pasa de ser una pirámide a ser un complejo de más de 15 hectáreas”, precisó.
Nosotros utilizamos —acotó— una tecnología adicional que es la imagen “multiespectral”. Es una cámara que toma los espectros de luz que no son visibles para el ojo humano y a través, sobre todo del espectro del infrarrojo cercano, nosotros observamos cambios en la densidad del suelo, ese reflejo de la otra parte nos indica qué hay debajo de la tierra.
Explicó que bajo ese precepto conceptual se estima que algunos elementos encontrados estarían bajo una gran cantidad de tierra y otros superficialmente.
Respecto a la probabilidad de hacer excavaciones en el área manifestó que es una de las tareas más fuertes pero que con prospecciones superficiales se puede analizar los tipos y las cantidades de materiales que hay, entre ellos cerámicos, metálicos, ofrendas y demás.
“Lo que observásemos en la superficie nos permitirá hacer un mapeo y nos daría toda la información adicional para saber que es cada cosa, no sería necesario excavar, pero bueno, siempre se plantea que la excavación es lo más llamativo de la arqueología, pero se puede hacer una aproximación. Lo bueno que tiene el elemento que hemos encontrado es que nos da un mapa, una foto fija de elementos, podemos establecer patrones de trabajo de cara a los investigadores. Por ejemplo, si un investigador tiene interés en los períodos más antiguos podríamos darle una serie de zonas, podría ir al tiro, de hecho, a excavar en las cabañas y no necesitaría buscarlas porque simplemente con la imagen del dron, mediría con unas cintas métricas y diría ‘aquí estoy, encima de una cabaña’ y sólo tendría que excavar”, señaló.
Por otra parte, afirmó que en los hallazgos se ha establecido que no existe una cualidad única, porque es una zona en la que se encontró “estructuras de piedras bastante grandes y que con el uso de la tecnología se ha podido determinar que el período de Tiahuanaco era muy complejo y que se observó que la gente de esa época vivía alrededor del agua, agricultura y ganadería adelantada”.
“Tenían tecnología sorprendente, por ejemplo en el trabajo de la piedra, era absolutamente increíble, el uso de cinceles de metal, una capacidad que tiene por ejemplo tanto por el tallado de la piedra, la cantidad de piedras que se han movido para la construcción de sus edificios, estamos hablando de que son una sociedad estatal poderosísima, pueden gestionar, pueden traer, pueden comprar, obligar a la gente a trabajar, esas capacidades nos hablan de su capacidad de gestión política, la capacidad de motivar a la gente para hacer las cosas, esos son los elementos más interesantes”, puntualizó.
Extensión de 640 hectáreas
Según el arqueólogo Gallego Revilla, la prospección del sitio de Tiahuanaco enfrenta a los estudiosos a nuevos misterios, estructuras y un inmenso territorio por explorar que se encuentra bajo tierra, es decir, “una gran ciudad” que albergó a una de las culturas más sorprendentes del mundo.
El hallazgo de las nuevas estructuras, fue detectado a través de un mapeo satelital de toda extensión de esta región, de este sitio arqueológico que alberga a la pirámide de Akapana, el templo de Kalasasaya, el templete Semisubterráneo, esculturas de sus jerarcas, la Puerta del Sol y restos de palacios militares y civiles.
La tarea realizada que encara tres etapas finalizará en los primeros días de noviembre con la entrega del Plan de Preservación y Conservación de la pirámide de Akapana.
“El trabajo que realizamos en principio iba a ser simplemente una topografía del sitio, una herramienta de gestión sobre todo pensando en las labores administrativas del Centro de Investigaciones Arqueológicas, Antropológicas y Administración de Tiahanaco (Ciaaat), del ente gestor pero dada las características del sitio, las necesidades particulares optamos por utilizar una tecnología en este caso de drones, imagen satelital”, aseguró.
De acuerdo con el investigador, se detectaron varias estructuras de considerables dimensiones en diversos sectores, estructuras pequeñas, denominadas por Gallego como cabañas, fosas, canales y caminos.
El equipo encontró una imagen fija de la extensión máxima del sitio histórico de Tiahuanaco que habla del poder económico, político, del sitio en un momento dado que es capaz de reconstruir todo el espacio, de separar los espacios religiosos, políticos del área donde habitaba la gente.
Según el arqueólogo, el uso de diferentes sistemas de toma de imágenes ha permitido complementar y optimizar los resultados sobre las estructuras de piedras talladas hasta cabañas, una foto fija de toda la vida de Tiahuanaco en un momento dado.
“Es una gran ciudad. A partir de la imagen del Satélite Sentinel 2 podemos observar Tiahuanaco en el momento máximo de expansión. El área central de Tiahuanaco tiene otra serie de yacimientos y demás, pero en el área interior estaríamos hablando de unas 650 hectáreas a diferencia del área que hasta ahora teníamos dentro de la declaratoria de la Unesco, como patrimonio de la humanidad, estábamos hablando de unas 140 hectáreas aproximadamente”, afirmó.
Con estudios topográficos, tecnología satelital y un dron se descubrió que el complejo arqueológico es más grande de lo que se conoce
ÁREAS INUNDABLES
El investigador de la Unesco, José Ignacio Gallegos, dio a conocer que la antigua cultura vivía en relación con el agua y que toda su actividad se desarrollaba conforme a este elemento, explicó que en los estudios se observó que en esa época construyeron zonas inundables pero que no se logró definir cómo se llenaban de agua esos sectores.
“Es una cosa muy curiosa, en realidad sabemos perfectamente que el lago (Titicaca) jamás llega a Tiahuanaco en el período histórico, lo que sí observamos es que en todo alrededor del espacio que nosotros hemos delimitado con el satélite, hay un área que es inundable, hay todo un espacio que probablemente durante unos meses al año recibe una cantidad de agua, no sé si subterránea o a través de los ríos, no sabemos todavía cómo, tenemos que ver esto pero son zonas que se compactan de agua y la gente vive en relación con el agua, y sus procesos religiosos, la construcción de canales tiene que ver con la presencia del agua; observamos las tallas de las piedras, hay serpientes acuáticas, o peces en los monolitos”, dijo.
INVERSIÓN Y TAREAS A DESARROLLAR
De acuerdo con los detalles, el Gobierno de Japón, a través de su agencia de cooperación JICA, invirtió entre 600 mil a 700 mil dólares lo que permitió establecer una serie de planes que se entregarán el 1 de noviembre a las autoridades del Estado.
“Se ha generado insumos de todo tipo, planes de turismo, dos laboratorios, el propio plan de manejo. Se han implementado dos laboratorios pequeños, uno de conservación y otro de arqueología, además de una biblioteca y un archivo documental del sitio”, dijo Gallego Revilla.
Se dotó de equipos topográficos, microscopios, hornos de trabajo con materiales de conservación. El laboratorio de arqueología recibió material de trabajo cotidiano, equipo de pesada para hacer estadística, entre otros. Asimismo, con la cooperación japonesa se entregaron sistemas hidráulicos para elevación y manejo de cargas, es decir, mover grandes volúmenes líticos: se les ha comprado dos elevadores, un montacargas de elevación y una grúa hidráulica para descargar cargas.
“Como en cualquier centro de patrimonio mundial, la Unesco va a seguir acompañando las necesidades tanto del ente gestor como el país, acompañamiento técnico, si en este caso el Centro de Investigaciones Arqueológicas, Antropológicas y Administración de Tiahanaco (Ciaaat) requiere un acompañamiento técnico en turismo, la Unesco le va a dar los insumos, las capacidades técnicas, les va acompañar para realizar las acciones, tengan un reconocimiento a nivel mundial”, dijo.
“Ha sido sorprendente para todos —acotó—, el resultado nos ha dejado con la boca abierta, de hecho, llevamos cerca de seis meses trabajando con los mapas y demás, y cada semana estamos en contacto y veíamos las imágenes sorprendentes, cada semana encontrábamos una cosa distinta, una gran sorpresa y una suerte de tener estos resultados.”
