Cocina. El “pedazo de cielo” de Marsia Taha abre sus puertas
Tras su exitoso paso por Gustu, la chef boliviana Marsia Taha, nominada al Latin America’s Best Female Chef 2024, decidió emprender un nuevo desafío: Arami (pedazo de cielo, en guaraní).
El restaurante abre sus puertas el mes de diciembre en la zona de Achumani, sur de la ciudad de La Paz, en medio de gran expectativa en el público paceño.
“Este restaurante estará muy centrado en la Amazonía. Bolivia es enorme y alrededor del 60 por ciento de ella es Amazonía. Gustu se centró en todo el ecosistema, pero ahora me voy a centrar en una zona geográfica en Arami”, comentó Taha.
La destacada chef internacional se propuso exhibir la abundante diversidad en Bolivia, poniendo una peculiar atención al vínculo entre la cordillera de Los Andes y la selva amazónica.
Taha explicó que, en los últimos años, trabajó en las tierras bajas con las comunidades locales, desarrollando una serie de investigaciones sobre ingredientes, productos y técnicas.
“Un restaurante que va a resumir mis 17 años de experiencia dentro del rubro. Este espacio será un homenaje a insumos de tierras bajas donde trabajaremos con pescados, raíces, frutas, hongos, nueces de palmas y una despensa más alternativa y poco explorada de este ecosistema tan vasto que abarca más del 60% de territorio geográfico de nuestro país”, comentó en sus redes sociales la mejor chef de Latinoamérica de la gestión 2024.
Entre los productos que ya promocionó se encuentra el tuyu tuyu, unas pequeñas larvas que crecen en el interior de las palmeras y que tienen un sabor afrutado y suculento.
Otro producto, conocido como pirarucu en Brasil, es el paiche, un pez depredador gigante no nativo de Bolivia que consume otras especies. Si bien el pescado se consume ampliamente en la selva tropical, no es popular en otros lugares, pero Taha promovió su consumo y establecido un sistema de suministro a restaurantes de la capital, beneficiando a las comunidades pesqueras y ayudando a equilibrar el ecosistema.
Luego está el caimán, o específicamente el caimán de anteojos, que es capturado legalmente una vez al año por la comunidad indígena tacana. Si bien el consumo de caimán es culturalmente inaceptable en ciertas partes del mundo, aquí se lo hace de manera controlada con reglas estrictas, como cazar solo machos adultos. La porción preferida de Taha es cruda.
El restaurante estará en la planta baja y arriba de un bar de vinos repleto de botellas bolivianas y, eventualmente, un laboratorio donde el equipo explorará nuevos ingredientes, técnicas y métodos de conservación.