Pese a las filas por combustible, garantizan la normal provisión durante Carnaval
En los últimos cinco días, las filas de vehículos que peregrinan por combustible han aumentado en varios puntos del país. Primero fue por el diésel, ahora es por la gasolina; pero, pese a ello, el ministro de Hidrocarburos y Energías, Alejandro Gallardo, garantizó la normal provisión del carburante durante el feriado por Carnaval, según el reporte de medios estatales.
"Estamos ya normalizando esos volúmenes y se garantiza que durante el periodo de Carnaval la gente pueda realizar sus diferentes actividades, realizar los viajes planificados que puedan tener en este feriado largo y así tengan tranquilidad en cuanto al transporte a las diferentes ciudades o departamentos", dijo el ministro Gallardo.
Según el titular de la cartera de Hidrocarburos, tras poder sortear algunos bloqueos de caminos, se están entregando los volúmenes de combustibles.
"Estamos entregando el volumen, se tuvo con tranquilidad; actualmente en La Paz no existen colas, principalmente en la provisión de gasolina y eso es debido a que se están entregando los volúmenes", dijo la autoridad nacional y exhortó a la población a no hacer "filas innecesarias", porque ello ocasiona especulación y comercialización irregular de combustibles.
Junto con la escasez de combustible también se evidencia la venta clandestina de gasolina al raleo. En la capital oriental, por ejemplo, esta es ofertada a Bs 10 por litro en los puntos de venta informal. En provincias, la situación es más crítica; en municipios como Montero, una botella de dos litros puede llegar a costar hasta Bs 20.
El presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, se refirió a esta situación admitiendo que existe un desvío del producto.
"Hay un problema en la distribución. Es evidente que se pierde combustible una vez que sale de la planta de YPFB y Yacimientos deja de tener el control. Existe un contrabando, tanto interno como externo, muy claro", afirmó.
Por último, añadió que en la estación de servicio no hay combustible, "pero a solo tres casas de distancia lo venden en bidones por cinco o seis pesos el litro. Y este es un problema real".