Encuesta revela aceptación de rasgos autoritarios
La población demuestra cierto nivel de aceptación sobre diferentes aspectos de la vida en Cochabamba, según revelaron encuestas realizadas por Ciudadanía, Ceres y Los Tiempos. Sin embargo, en la presentación del análisis de datos se demostró preocupación por respuestas que se contradicen con la realidad percibida. La exposición se realizó en el Sexto Foro Regional: Cultura y bienestar en las áreas metropolitanas de Bolivia.
El 82 por ciento de las personas encuestadas consideran que ejercer la democracia es tener la libertad de elegir. No obstante, esto se ve contradicho por un 50 por ciento que cree que el servicio militar debe ser obligatorio. Existen rasgos autoritarios que se toman con naturalidad, explicó la analista Isabella Prado.
Llama la atención la aparente naturalidad con la que la ciudadanía toma estos actos de autoritarismo (...) Si la gente acepta estos rasgos es porque de cierto modo acepta las ideas, aseveró.
Por otro lado, un 33 por ciento de las personas creen que no pueden expresar sus ideas en espacios donde la mayoría piensa lo contrario. Se puede pensar que un 33 por ciento no es mucho, pero en un país democrático es preocupante y demuestra que los derechos no están garantizados a toda prueba, señaló.
A este tema se suma un 45 por ciento de personas que considera que hay ideas que no deben difundirse. Se observa rasgos de intolerancia, autoritarios en el Gobierno y la sociedad, dijo.
Entre otro de los temas que se abordó está la vivienda y los servicios públicos sociales donde se observa aceptación. Un 70 por ciento se siente satisfecho con la calidad de su vivienda. A ello se suma el 10 por ciento que está muy satisfecho, frente a un 18 por ciento que dijo no.
La situación es similar en lo que se refiere a establecimientos educativos que son considerados buenos por un 50 por ciento de la población y regular en un 39 por ciento. De igual modo ocurre con la calidad de los servicios de salud cuya aceptación es del 47 por ciento.
Sólo el 51 por ciento acude a la salud púbica, un nueve por ciento al seguro, mientras que el 21 por ciento visitan a médicos particulares. Si de verdad fuera considerada buena la salud, más del 80 por ciento iría al Viedma o seguros, dijo un participante.