“No tenemos miedo”, gritan nicaragüenses en la combativa Masaya
Pobladores de la combativa ciudad nicaragüense de Masaya salieron ayer a las calles para exigir la salida del poder del presidente Daniel Ortega y justicia por los más de 220 muertos en las protestas que sacuden al país desde hace más de dos meses.
“¡No tenemos miedo!”, “¡Que se vaya!”, “¡Asesino!”, “¡Elecciones ya!”, gritaron los lugareños mientras recorrían las angostas calles de esta ciudad de artesanos y pequeños agricultores, que se declaró en rebeldía hace dos semanas.
Cargando la foto de su hijo de 15 años muerto de un balazo en el pecho en una barricada, marchaba Aura López, una empleada doméstica de 45 años, vestida de blanco con un lazo negro en la solapa.
“La Policía no me le perdonó su vida. Me lo mataron. Pedimos que nos ayuden a sacar a Ortega por las buenas o por las malas. Es el culpable de este sufrimiento”, dijo.
Los pobladores esperaban en el barrio de Monimbó, epicentro de la represión, a expertos de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh) y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
DENUNCIAN INTENTO GOLPISTA
El Gobierno de Ortega califica las protestas y la exigencia de la renuncia de Ortega como una “intentona golpista” apoyada por Estados Unidos y acusa a los manifestantes de “delincuentes” y “pandilleros”.