¿Es o se hace?
En el mundo hay mandatarios que enorgullecen a sus ciudadanos y otros que los avergüenzan. Sabemos que de los primeros hay pocos y que los segundos abundan y nos quedan dos caminos: o nos callamos y los dejamos avergonzarnos o, ejerciendo el derecho constitucional de opinar y decir, marcamos, sus “supinas ignorancias” (que ignoran el tema).
Prefiero lo segundo, porque me rebela que Luis Alberto Arce Catacora sea capaz de denunciar “plañideramente”, además, en “el Grupo de Puebla”, lo siguiente:
“Tanto asambleístas nacionales y departamentales, a la cabeza de los comités cívicos, como ocurriera en 2019, (están otra vez) tratando de desestabilizar al gobierno democráticamente elegido planteando propuestas, inclusive, que van desde discutir un federalismo, discutir un nuevo pacto fiscal y otro tipo de planteamientos que solamente tienen el objeto de desgastar y desestabilizar” (extraído de La Razón, medio adepto al Gobierno).
El Grupo de Puebla, es un rejuntado de países de la izquierda “sigloveintiunera” (dizque socialistas) que están convencidos de que sólo ellos pueden gobernar países como los nuestros; pues allí Arce denunció que en Bolivia se busca la desestabilización porque gobernadores, cívicos, rectores universitarios, analistas, sugirieron (algunos exigimos) que se ponga en marcha el mecanismo constitucional (ley de autonomías) que permita que los departamentos puedan recibir mayores ingresos a partir de lo que ellos mismos generan, es decir del pago de impuestos que se va al centralismo y no retorna a los departamentos que los generan en cantidades que los ayuden a sostener los gastos y cubrir las necesidades que se incrementan producto del crecimiento poblacional, por nacimientos, o por las migraciones interprovinciales o interdepartamentales.
Que el presidente de la república (Estado Plurinacional) se queje por la solicitud de un pacto fiscal adecuado a los tiempos es una muestra de ignorancia de lo que es el Estado y cómo funciona.
Pedir, representar, exigir, que se debata el pacto fiscal es plantear que se realice la ley, es decir que cumpla el fin para el que fue escrita en la Constitución. Eso no tiene absolutamente nada de desestabilizador; muy por el contrario, es demostrativamente institucionalizador, porque se da en el marco que otorga el procedimiento constitucional y democrático del Estado; todo dentro de la legalidad, nada fuera de ella.
¿Qué pretende Arce? ¿Que todo sea un pleito de calles? ¿Por qué hacerlo de ese modo?, pudiendo lograr acuerdos en una mesa de negociaciones entre él mismo, técnicos, y ministros del poder ejecutivo nacional con representantes departamentales, tan legítimos como él, porque también fueron electos en elecciones, algunos de ellos con votaciones más altas que las que él logró, (guardando las distancias nacionales y departamentales).
Deje el pleito para después, Arce, si no hay acuerdo porque usted se pone tozudo y no quiere soltar una parte más grande de la misma plata generada por los departamentos, tal vez haya pleito en las calles, pero no se adelante, debata primero y no nos salga con que no hay plata porque entre el huido, que ahora ocupa un lugarcito, en “su parnaso” (de usted) y “la usurpadora” se gastaron todo.
No vaya a salir con ese argumento (no hay plata) porque lo que se va a incrementar, es plata que aún no se ha depositado porque serán impuestos coparticipables a futuro, que aún no se han pagado ni repartido; no hay excusa, señor presidente, argumentar que eso es “desestabilizador” es una tontera que no aguanta una conversación seria.
Y el federalismo, señor presidente constitucional del Estado Plurinacional de Bolivia, es un sistema organizativo del Estado (para hacerlo corto); hay y ha habido países federales desde “liberales” a “socialistas”, a muchos les ha ido bien y otros son y fueron un desastre; el tránsito del unitarismo o de las autonomías al federalismo, ese sistema que tanto lo asusta y que puede ser mejor para los bolivianos, tiene que hacerse en el marco de una asamblea constituyente y su resultado deberá ser aprobado en un referendo, de manera que no se ponga nervioso; son años de preparación y debate, de manera que, aún si al gobernador cruceño se le disparan súbitamente las ganas federales, esto es un proceso y, sobre todo necesita tener un proyecto que él no tiene escrito.
Pero sepa usted, “excelentísimo”, que el federalismo es parte de un proceso y es democrático, abierto, participativo, propositivo, aun cuando no sea tiempo de aquello pudiendo profundizar la autonomía; se lo dice un “federalista” que tuvo la suerte de estar en la creación del MFD, hace muchos años.
Presidente: Todo lo que se propone desde la oposición o de los “otros movimientos sociales”, es decir, cívicos, medios de comunicación y otros, son propuestas que se hacen hasta lograr debate en el marco de la democracia. Eso es lo mejor que puede pasar, hasta para dar una imagen o una sensación de democracia en un Estado cada vez menos democrático por cómo actúa su gobierno.
Lo que hace el Gobierno no es constitucional, no lo es mandar a escribir proyectos de ley que buscan cercenar autonomías constitucionales, sometiéndolas y subsumiéndolas a planes de gobierno nacional (no digamos Estado); pretender dominar el Poder Judicial, contraviniendo la CPE que prohíbe “reunir los órganos públicos en un solo órgano” (el Ejecutivo), elaborar leyes peleadas con el procedimiento constitucional bajo pretexto de evitar el lavado de dinero y otros temas que, de ser bien hechos y no llevaran “el fusil o el puñal bajo el poncho” tal vez fuera bueno, el problema es la “intencionalidad oculta”.
Me dio vergüenza, reitero, escuchar a Arce Catacora en el Grupo de Puebla porque demuestra no entender mucho de nada o nada de mucho… lo que me lleva a preguntarme: ¿es o se hace? y creo que es una mezcla de las dos cosas, él sabe un poco lo que hace e ignora mucho de lo mismo. Pero eso le sirve, momentáneamente, para parecer contestatario, revolucionario y no sé qué cosas más.
En Santa Cruz hay un dicho popular: “se hace, pa peerse a gusto”… se me antoja que hay harto de eso en este caso.
El autor es periodista
Columnas de CARLOS FEDERICO VALVERDE BRAVO