EEUU sube la presión sobre Venezuela, pide liberar a presos
Estados Unidos aumentó la presión sobre Venezuela al exigir ayer “un proceso democrático” y la liberación de los “presos políticos”, el tercero de los movimientos del Gobierno de Donald Trump sobre la nación suramericana en una semana.
La renovada presión de EEUU sobre Venezuela ha generado expectativas en la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre si Trump será la llave para aplicar la Carta Democrática, un proceso que podría llevar a la suspensión de Caracas del ente.
En un comunicado del Departamento de Estado, EEUU pidió ayer la liberación de las “más de 100” personas presas en Venezuela “por sus convicciones políticas”, entre ellas el líder opositor Leopoldo López, quien ayer cumplió tres años en la cárcel.
Está reacción del Departamento de Estado se da 48 horas después de que la justicia venezolana, el jueves, ratificará en última instancia la condena de casi 14 años de prisión contra el dirigente opositor venezolano.
Trump ya exigió la libertad de López el miércoles pasado tras reunirse con su esposa, Lilian Tintori, en la Casa Blanca, dos días después de que su Gobierno impusiera sanciones económicas al vicepresidente venezolano, Tareck El Aissami, por presunto narcotráfico.
El comunicado de ayer, firmado por el portavoz interino del Departamento de Estado Mark Toner, es, por tanto, el tercer paso significativo del Gobierno de Trump en sólo una semana sobre su política hacia Venezuela.
EEUU está “consternado” no sólo por “los presos políticos” sino también por “otras acciones tomadas por el Gobierno de Venezuela “para criminalizar el disentimiento y negar a sus ciudadanos los beneficios de la democracia”, según la nota.
Así, el Gobierno de EEUU llama “a la inmediata liberación de todos los presos de conciencia”, pero también al “respeto del Estado de derecho”, “la libertad de prensa”, “la separación de los poderes constitucionales” y “la restauración de un proceso democrático que refleje la voluntad del pueblo de Venezuela”, sin precisar más al respecto.
En la nota se cita a algunos “presos políticos”: el fundador de Voluntad Popular (VP), Leopoldo López; los exalcaldes de Caracas, Antonio Ledezma, y de San Cristóbal, Daniel Ceballos, así como a “muchos otros estudiantes, activistas, periodistas y manifestantes pacíficos”.
Durante la campaña electoral, Trump no dio pistas sobre su política hacia Venezuela, más allá de expresar su “solidaridad con los pueblos sufridos de Cuba y Venezuela” y prometer a los exiliados de ambas naciones en Florida luchar “contra la opresión de los regímenes de (Raúl) Castro y Maduro”.
Pero los movimientos de esta semana indican “que el Gobierno de Trump está tomando una posición pública más dura con el régimen de Maduro que el Gobierno de Obama”, indicó a Efe Michael Shifter, presidente del centro Diálogo Interamericano.
También es significativo que, en los últimos días, Trump haya hablado de la situación de Venezuela, por separado, con los presidentes de Perú, Colombia y Argentina, según las informaciones oficiales sobre sus llamadas telefónicas.
López llama a “rebelión”
El líder opositor Leopoldo López llamó ayer a una “rebelión” electoral “no violenta” para presionar la realización de comicios generales en Venezuela, en una carta leída durante una protesta en Caracas al cumplir ayer tres años preso, de los casi 14 a los que fue sentenciado. “Estamos en la obligación de promover y organizar la rebelión de los votos. Si el Consejo Nacional Electoral (CNE) continúa con su actitud, organizaremos entonces nosotros las elecciones”, desafió López en una carta fechada en la cárcel militar de Ramo Verde, en las afueras de la capital.
“Organicemos una gran consulta popular en la que la gente vote y decida si quiere o no que haya elecciones presidenciales en 2017”, indicó el político.
El tercer aniversario de la detención de López llevó a simpatizantes y a detractores a tomar las calles de Caracas, unos para pedir su liberación, y otros para exigir que se aumente su condena.
Ninguna de las dos marchas, ni la organizada por el partido liderado por López, Voluntad Popular (VP), ni la llamada por el Comité de Víctimas de las Guarimbas, afín al Gobierno, contó con una gran asistencia.
APOYO DEL CONGRESO
Republicanos y demócratas en el Congreso apoyan —según Michael Shifter, presidente del centro de estudios Diálogo Interamericano— que EEUU adopte una posición más dura frente a Venezuela porque “cada vez están más preocupados por el deterioro de la situación en Venezuela y frustrados con el régimen de Maduro”.
La semana pasada, un grupo bipartidista de 34 legisladores envió una carta a Trump para pedir más presión sobre el Gobierno de Venezuela con la imposición de sanciones a funcionarios que “están beneficiándose con las violaciones de derechos humanos”.