Conductor embiste a una multitud de gente en Canadá y deja al menos 11 muertos
En vísperas de una elección crucial en Canadá, una jornada de celebración para la comunidad filipina local, el festival en honor al héroe nacional Lapu Lapu se tornó trágico el sábado por la noche en Vancouver cuando un todoterreno negro que circulaba a toda velocidad embistió a una multitud, matando al menos a once personas e hiriendo a varias más.
El ataque ocurrió alrededor de las 20:14 hora local a lo largo de Avenida 43 este, en una zona peatonal llena de puestos de comida y espectadores, observando la conclusión de las festividades.
La escena era apocalíptica. Testigos dijeron que vieron el vehículo atravesar los puestos a toda velocidad y atropellar a decenas de personas.
"Los vi volar por el aire", dijo uno de los presentes. La policía de Vancouver arrestó a un residente de 30 años que inicialmente fue detenido por algunos valientes participantes a la fiesta.
Los investigadores descartaron intenciones terroristas en el ataque y están investigando posibles problemas de salud mental del conductor, un hombre con rasgos asiáticos que dice "lo siento" en videos publicados en las redes sociales.
La policía explicó que el autor del ataque ya era conocido por las fuerzas del orden.
Tras los repetidos y violentos impactos, con la parte delantera del coche destrozada, había cadáveres tendidos en el asfalto, niños heridos y gente que intentaba desesperadamente ayudar a los heridos.
"Había cadáveres por todas partes", dijo entre lágrimas Yoseb Vardeh, propietario de uno de los camiones de comida del evento.
Según la Autoridad Provincial de Servicios de Salud, 26 personas fueron trasladadas al hospital, algunas en estado crítico.
Más de 22 ambulancias acudieron al lugar. El tramo de la calle Fraser entre las avenidas 43 y 46 permaneció cerrado durante horas para permitir las operaciones de rescate y policiales.
El alcalde de Vancouver, Ken Sim, dijo que estaba "conmocionado y profundamente entristecido" por el incidente y expresó su solidaridad con la comunidad filipina, mientras que el primer ministro de Columbia Británica, David Eby, aseguró a la provincia su pleno apoyo.
Los líderes federales, incluidos Jagmeet Singh, el primer ministro liberal Mark Carney y el conservador Pierre Poilievre, también expresaron públicamente sus condolencias.
Carney, quien canceló su último mitin, dijo que estaba "conmocionado y devastado por el ataque en Vancouver", pero aseguró que "no hay ninguna amenaza en curso para los canadienses".