Villa Tunari y Puerto Villarroel, en emergencia por las inundaciones
En el trópico de Cochabamba, las inundaciones provocadas por las fuertes lluvias dejaron viviendas dañadas, cultivos afectados y comunidades aisladas. Los desbordes de ríos afectaron principalmente a Villa Tunari y Puerto Villarroel. Además, de los municipios de Pojo y Totora, donde varias comunidades han quedado aisladas.
El gobernador de Cochabamba, Humberto Sánchez, visitó el martes las comunidades afectadas en Villa Tunari para entregar ayuda humanitaria y verificar la magnitud de los daños. Alimentos, colchones, ropa de cama y herramientas fueron distribuidos entre las familias que perdieron sus pertenencias.
“Según la información preliminar, hay cuatro viviendas que han desaparecido y otras que están con rajaduras”, afirmó la autoridad, que también pidió garantizar combustible para la maquinaria que realiza trabajos de dragado y encauzamiento.
Los testimonios reflejan la gravedad de la situación. Marisabel Cuci aseguró haberlo perdido todo: “No tengo nada ni para comer, mis hijos sin ropa se han quedado”.
En Puerto Villarroel, el alcalde Limber Cossio informó que el municipio gestiona la declaratoria de zona de desastre para habilitar recursos de manera inmediata debido a que varias comunidades permanecen bajo el agua y sin alimentos. Señaló que 395 familias están damnificadas y que la afectación agrícola alcanza 3.850 hectáreas de cultivos, entre ellos yuca, banano de exportación, papaya, cítricos, maracuyá y piña. Explicó que se prevé coordinar apoyo técnico para productores piscícolas y agrícolas mediante alimento balanceado, fertilizantes y trabajos de dragado en sectores críticos. Afirmó que la prioridad es resguardar a la población, contar con evaluaciones precisas y recuperar gradualmente los caminos y zonas productivas.
Pronóstico
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) informó que las lluvias registradas responden a un comportamiento atmosférico propio de la temporada, reforzado por flujos húmedos desde el Atlántico y sistemas inestables del sur.
Señaló que, según el análisis climatológico, en el trópico no se prevén precipitaciones hasta el 22 de noviembre, lo que dará un margen de días para atender las emergencias. Sin embargo, advirtió que los suelos permanecen saturados y cualquier lluvia podría generar nuevos desbordes.
El Senamhi indicó que ese día ingresará un nuevo sistema inestable y recomendó que las autoridades tomen previsiones, además de recordar que las alertas fueron comunicadas con anticipación.
Producción
Desde el sector productivo, el dirigente Leonardo Loza denunció una atención estatal insuficiente frente a la emergencia. Aseguró que “cientos de familias afectadas” y “miles de hectáreas” presentan daños severos en cultivos y piscicultura, mencionando además riesgos estructurales en puentes y caminos. Señaló que la falta de intervención podría afectar el abastecimiento de alimentos para Cochabamba y Santa Cruz.

























