Tras la confirmación del brote de influenza aviar, las granjas avícolas aplican dos formas para eliminar a las aves afectadas luego de la eutanasia y el productor debe cumplir una pausa sanitaria de al menos tres meses hasta confirmar la erradicación total del virus, informó ayer el vicepresidente de la Asociación Departamental de Avicultores (ADA) de Cochabamba, Iván Carreón.