Frutos rojos para el estómago y corazón
En cada estación la naturaleza nos brinda frutas y verduras que no sólo deleitan el gusto, sino también aportan múltiples beneficios a la salud. Uno de los aliados de esta temporada son los frutos rojos que tienen varias propiedades.
La nutricionista y dietista holística Paola C. Del Carpio Rossell explica que los frutos rojos (también conocidos como frutos del bosque) se caracterizan por ser alimentos con muy bajo contenido de azúcar y con potentes antioxidantes. Son anticancerígenos, antitumorales y antiinflamatorios.
“Por su contenido en fibra mejoran la salud intestinal, ya que son prebióticos de excelente calidad”, agrega y menciona que en este grupo están los arándanos, frutillas, fresas, frambuesas y moras.
“El color rojo y morado que los caracteriza nos da una importante señal: su contenido en flavonoides, sobre todo las antocianinas, conocidas por ejercer efectos terapéuticos potentes en el cuerpo”, señala la especialista, quien es fundadora del centro Energía Nutricional y trabaja también en el centro de bienestar Integrando.
Por otro lado, Del Carpio comenta que antes de llevar los alimentos a la boca, estos pasan por uno de los sentidos importantes en nuestra alimentación: la vista. “Bien dicen que la comida entra por los ojos. Esta característica hace que estos alimentos sean atractivos y llamativos, motivándonos a crear y ampliar nuestra manera de consumirlos”, indica
¿QUÉ PROPORCIONAN A LA SALUD?
La nutricionista señala que cuando uno incluye a los frutos rojos en la alimentación aporta nutrientes que ayudan a combatir la oxidación que constantemente se produce en el cuerpo. Es decir, combate enfermedades como el cáncer. Además, es ideal para diabéticos y mejora el funcionamiento cerebral.
“Si estamos en un plan de pérdida de peso, son excelentes para las meriendas, por aportar saciedad, pero pocas calorías. Además, su sabor es una inyección de motivación, te conectas a tus emociones y te brinda claridad mental”, resalta.
Menciona que varios estudios destacan su importancia en la prevención de enfermedades cardiovasculares, debido a que reducen los triglicéridos, colesterol y la hipertensión arterial. “Por su contenido en fibra, son beneficiosas para combatir el estreñimiento, controlar los niveles de glucosa en la sangre y son de gran apoyo para combatir obesidad y sobrepeso”, afirma.
Especifica que los arándanos previenen infecciones urinarias y fortalecen los vasos sanguíneos, reduciendo así las varices. La experta recomienda consumir los que producen en el país.
CUÁNDO Y CÓMO CONSUMIRLOS
A pesar que ahora los conseguimos casi todo el año, Del Carpio especifica que la temporada de estos frutos es el verano. “Al consumir en temporada los alimentos, nos aseguramos que tengan la mejor calidad y cantidad de nutrientes. Son más económicos y más fácil de encontrarlos”, dice.
Aconseja que es mejor comprarlos orgánicos, más aún si hablamos de las frutillas, pues son muy delicadas, necesitan mucho cuidado y pesticidas para su cultivo.
Para reducir los pesticidas, la especialista recomienda diluir aceite esencial de limón o toronja, bicarbonato de sodio o vinagre de manzana en agua para una mayor seguridad al consumir las frutillas.
Del Carpio sugiere consumir estos frutos por lo menos tres veces a la semana.
“Nuestro límite es la creatividad. Si bien es excelente consumir la fruta entera, masticar, sentir su sabor y conectarse con el alimento y lo que produce, podemos ampliar sus formas de consumo y así, hacer de nuestras comidas un goce total”, manifiesta.
Señala que sólo se necesita tener en cuenta un aspecto: a altas temperaturas se reduce la cantidad de algunos micronutrientes.
Del Carpio comparte con los lectores de OH! algunas formas de consumir los frutos rojos:
• Mermeladas caseras con chía. Una delicia e ideal para controlar el apetito y ansiedad, asegura.
• En batidos con leche o bebidas vegetales
• Deshidratados. “Buena manera de conservarlos y además adquieren un sabor especial que hace más sabrosa la granola casera”, indica.
• Smoothies para niños, que destacan por ser atractivos y deliciosos.
• Topping en panqueques, en porridge de avena, añadirlos al yogur e incluso combinarlos con un helado.
RECETA:
PUDÍN DE CHÍA
Licuar las moras y/o frutillas con leche de almendras. En medio vaso de esta mezcla, añadir poco a poco una cucharada de chía, batir bien y esperar a que las semillas se hidraten por completo.
Refrigerar la preparación por una noche y servirla al día siguiente. Una opción ideal si se busca una merienda nutritiva y con bajas calorías.
(Receta compartida por Del Carpio)
